El monstruo agroindustrial global Monsanto sufrió un duro revés en Estados Unidos, por primera vez un jurado de ese país, de San Francisco, dictaminó que debe pagarle casi 290 millones de dólares a un jardinero por no advertir que el glifosato que utilizaba era cancerígeno. Dewayne Johnson posee un linfoma incurable y se encuentra en grave estado.

El jurado determinó que la empresa actuó con “malicia” y que su herbicida RoundUp, y su versión profesional RangerPro, contribuyeron “sustancialmente” a la enfermedad terminal de Johnson. La jueza Suzanne Ramos Bolanos fue la encargada de emitir la sentencia .

Monsanto, por su parte, confirmó que apelará esta decisión. “Sentimos empatía por el señor Johnson y su familia”, expresó Monsanto mediante un comunicado luego de que se les ordenase pagar casi 290 millones de dólares en daños. Sin embargo, la compañía defiende “vigorosamente este producto con 40 años de historia que continúa siendo vital, efectivo y seguro para agricultores”.

Los beneficios netos declarados por el gigante del glifosato y las semillas transgénicas ascendieron a 15.000 millones de dólares en 2017, y sus productos continúan expandiéndose. Desde mayo de este año, se encuentra bajo el control de la empresa química Bayer. Dada la pésima reputación de Monsanto, se decidió que no llevaría ese nombre sino que se usaría el de la compañía alemana.

Monsanto cuenta con antecedentes en los tribunales de Estados Unidos, sólo que en el año 2012 logró un arreglo con una localidad de Virginia occidental por el que le pagó 93 millones de dólares por ocasionar perjuicios a la salud de sus habitantes. Luego de este arreglo, la multinacional recibió otro golpe a finales de 2015, esta vez en Francia, cuando la justicia gala ordenó que indemnizara a un agricultor intoxicado en 2004 por los vapores emanados de otro producto de Monsanto, el Lasso, cuyo uso fue prohibido en varios países.

La demanda de Dewayne Johnson contó con el respaldo de los resultados de un estudio realizado en 2015 por la Agencia Internacional de Investigación contra el Cáncer, parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).  En aquel momento, la OMS clasificó al herbicida Roundup, que posee como  ingrediente principal al glifosato, como “probablemente cancerígeno”

La empresa que nació en el estado norteamericano de Saint Louis cuenta entre sus principales mercados a India, Estados Unidos, Brasil, Argentina y Canadá.