El financista Bernie Madoff, autor de una de las mayores estafas que se recuerde en la historia reciente de Wall Street, falleció este miércoles en prisión, mientras purgaba una condena de 150 años.

Su deceso, aparentemente producido por causas naturales, se produjo en el centro médico de Butner, Carolina del Norte, cercano a la prisión donde se encontraba.

Su apellido quedó ligado al desfalco cometido a través de la financiera Bernard Madoff Investement Securities, que se quedó con unos U$S 64 mil millones de inversionistas de primer nivel. Fondos de pensión y de inversión internacionales, bancos de renombre (BBVA, Santander y BNP Paribas, entre ellos) y hasta equipos de ligas deportivas profesionales, como los New York Mets de béisbol, fueron sus víctimas.

El sistema utilizado por Madoff fue el famoso esquema Ponzi. El antiguo método piramidal, perfeccionado por el italiano Carlo Ponzi en Estados Unidos hacia 1920, consiste en ofrecer a terceros invertir en activos a los que se presenta como altamente redituables. A medida que estos obtienen ganancias (a veces a costa del propio organizador), el operador consigue nuevos inversores, con cuyo capital se van pagando los rendimientos de los que entraron al comienzo. El ingreso de fondos frescos permite mantener el negocio.

La burbuja estalló en 2008, cuando su propia familia lo denunció ante el FBI. Madoff fue apresado y llevado a juicio: lo sentenciaron a prisión perpetua, pena que luego le fue conmutada a 150 años.

El caso marcó de manera profunda al mundo de las finanzas. También sirvió de inspiración para el mundo del cine, que lo retrató en la película Wizard of lies (El mago de las mentiras), en la que Robert de Niro personificó a Madoff.