Tras días de silencio, luego de la tragedia en la escuela de Moreno en la que murieron Sandra Calamano (48) y Rubén Rodríguez (45), la gobernadora salió a hablar sobre el tema. El viernes afirmó en las redes: «Durante este año hicimos más de 1000 tareas de mantenimiento en escuelas de Moreno y particularmente en la escuela Nº 49 realizamos cinco intervenciones vinculadas al gas, la última un día antes de la tragedia, realizada por un gasista matriculado». Al menos seis veces la comunidad educativa del colegio había alertado a las autoridades sobre la pérdida de gas.

Ayer se conoció la renuncia de Sebastián Nasif, el interventor que había puesto el gobierno de Vidal al frente del Consejo Escolar de Moreno, una movida que buscaría exculpar a la gobernadora y su ministro de Educación, Sánchez Zinny, que por el momento sigue en su cargo. La nueva interventora será Ana Karina Politi, quien fue presidenta del Consejo Escolar de Malvinas Argentinas y está ligada políticamente con el exintendente de ese partido, Jesús Cariglino.

De acuerdo al informe del Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB), son 46 las escuelas con problemas de gas. La tragedia visibilizó una crisis de infraestructura escolar, y motivó la acción de los directivos: 786 establecimientos cerraron sus puertas. Recién abrirán cuando un inspector matriculado certifique que están en condiciones de funcionar. En General Rodríguez hay 70 clausuradas, en La Plata 54. En el Secundario 17 y Primario 27 de José C. Paz, los padres se atrincheraron en las rejas y no dejaron pasar al inspector y la policía «hasta que no arreglen el gas, la luz, los baños, y el piso que tiene riesgo de hundimiento». Debieron retirarse. En la N° 23 de Moreno enviaron a un camión a reemplazar la «chancha» de gas, pero se hundió el piso.

Vidal atribuyó los problemas a las gestiones anteriores. Dijo que desde 2016 llevan realizadas más de 6000 obras, e invertidos $ 21 mil millones en infraestructura escolar, para recuperar «la dignidad que, durante 28 años de desidia, fueron perdiendo». Sin embargo, desde su asunción, Educación perdió tres puntos porcentuales en el presupuesto total de la Provincia. También echó culpas al Consejo Escolar de Moreno: «La mayoría es kirchnerista». Aunque omitió decir que está intervenido hace meses por el Ejecutivo.

Otro temor es quién controla a los inspectores. En Moreno, uno de los documentos que se quisieron llevar del Consejo Escolar intervenido (hasta que una vigilia docente decidió impedirlo) exhibe la autorización firmada por el renunciado interventor Nasif al gasista Gerardo Rojas, que revisó un jardín. Su matrícula estaba vencida desde el 31 de marzo. «