Irma tiene 81 años y una paciencia que en estos casos pone en juego nada menos que la vida. Y hoy la vida es la vacuna. Eso buscaba cuando intentó anotarse en la web de la Ciudad de Buenos Aires, que solo se abrió con cupo limitado para mayores de 80. Al tener cobertura médica con la obra social IAPOS y atenderse en el Hospital Italiano, la derivaron a ese centro de salud privado, que también se la negó. Excepto que decidiera dejar su obra social para ser parte del Plan de Salud del Italiano.

Más del 17% de las vacunas aplicadas en CABA fueron derivadas a centros privados. Denuncias como las de Irma, fallecimientos de médicos esenciales que aún no habían recibido las dosis mientras miles de psicólogos y otros profesionales autónomos se vacunan en River, y el stock de 62 mil vacunas ya otorgadas por la Nación pero aún sin aplicar por el gobierno porteño, chocan con el reclamo de esta semana del ministro Fernán Quirós para recibir más vacunas que otras jurisdicciones.

El reclamo de los médicos coincide: CABA tiene las vacunas, pero no prioriza a los esenciales como en el resto del país. Los docentes cuestionan: “¿Son los psicólogos más prioritarios que nosotros?”. La lucha de las y los maestros, y la comparación con Provincia, lograron torcer la decisión de Ciudad, que finalmente iniciará la vacunación a docentes a mitad de semana.

Irma, docente universitaria jubilada de la Universidad de Rosario con más de 20 años de residencia en CABA, fue una de las que intentó en vano anotarse el viernes 19 de febrero a las 14, cuando abrió la web de Ciudad y colapsó en minutos. Luego, la administración porteña habilitó un formulario para empadronarse, en el que preguntan por “cobertura médica”. Como tiene como prestador al Hospital Italiano, Irma puso que sí, y recibió un correo del GCBA en que le informan que al contar “con un prestador de salud que forma parte de la campaña de vacunación” debe dirigirse a la web de ese privado. Sin embargo, el Italiano pone como requisito “estar afiliado al Plan de Salud”. Al ser a través de la obra social santafesina IAPOS, que tiene convenio de atención en el Italiano, Irma no tuvo acceso.

Cuando se comunicó con el 147 de CABA le dijeron que “no se pueden modificar los datos ni reempadronar”, que siga llamando “hasta que lo arreglen”. Ante la angustiosa insistencia, la operadora del 147 (Noelia) le confió que “se han reportado muchos casos como este”, que lo mejor es que hable con IAPOS “para que haga un convenio con el Italiano”.

“La solución no puede ser presionar a una obra social o que me pase a la prepaga del Italiano por las vacunas que Nación le dio a la Ciudad. Este maltrato al que nos someten es por la privatización de las vacunas, no pueden discriminar así”, reclama Irma en diálogo con Tiempo. Y agrega: “En lugar de vacunar a los esenciales, desde hace un mes la Ciudad permite que todos los que tengan matrícula vinculada a salud y sean autónomos puedan vacunarse en River. Vivo en Núñez, he visto las colas de gente joven yendo a vacunarse, muchos psicólogos que siguen atendiendo por teleconsulta, mientras a los esenciales los dejaron en banda”.

En efecto, mientras terapistas y otros trabajadores de la salud que están en la primera línea de lucha contra el coronavirus aún no han sido vacunados en la Ciudad, en el Vacunatorio de River Plate se inocula a 400 profesionales autónomos por día, desde el 2 de febrero, no importa su edad ni si se desempeñan en modalidad presencial. Se estima que esa posta extrahospitalaria seguirá activa otras dos semanas, y que al cabo de un mes y medio habrá vacunado a unos 12 mil no esenciales.

Este al menos errático orden de prioridades y la tercerización del manejo de las dosis disponibles en empresas de medicina prepaga contrastan con el reclamo de Quirós a la Nación a principios de semana, pidiendo que le entreguen más vacunas. Hoy se reparten de acuerdo al porcentaje poblacional de cada distrito, pero, aduce el ministro porteño, CABA tiene una tasa mayor de trabajadores de la salud y adultos mayores que otras jurisdicciones.

Sin embargo, aún cuenta con vacunas sin utilizar. De las 226.725 que Nación le envió, se aplicaron 164.726, según refleja el Monitor Público de Vacunación.

Un 17,5% de las dosis fueron aplicadas por el sector privado, de acuerdo a lo relevado por el sitio oficial de CABA, donde también figura que 55 mil trabajadores de la salud que no están en la primera línea de lucha contra el coronavirus (es decir, no trabajan en terapias ni en emergencias ni manejan muestra del virus) ya recibieron su primera dosis.

...
(Foto: Xinhua)

“En CABA hay vacunas para prepagas pero faltan para el personal de salud”, denunció ayer a la mañana la Comisión Nacional de Salud de ATE, tras la noticia del fallecimiento de dos médicos esta semana, víctimas del Covid-19: María Rosa Fullone, 56 años, médica de guardia del Hospital Fernández, y Carlos Sereday, de 65, jefe de cirugía plástica del Hospital de Quemados. No habían llegado a vacunarse.

Desde ATE aseguran que solo un 50% de los trabajadores porteños de la salud recibieron la vacuna (para la Asociación de Médicos Municipales, falta que la reciba entre el 20 y 30%), y se declararon en estado de alerta y movilización. “Hemos puesto el cuerpo en la primera línea de la batalla sanitaria con elementos de seguridad insuficientes y de mala calidad. Inmunizarnos es la única manera en la que podemos estar tranquilos trabajando. Esto muestra la improvisación que tienen en la Ciudad”, enfatiza Héctor Ortiz, trabajador de los hospitales Durand y Pedro de Elizalde.

“No todo el personal de salud de la Ciudad está vacunado –concuerda una pediatra de un Cesac del sur porteño–. En River empezaron a vacunar hace bastante a profesionales de salud autónomos que se anotan, mientras a nosotros nos vacunaron recién hace un par de semanas después de que hicimos una movida con carteles. Las compañeras que estaban de vacaciones en ese momento todavía están esperando que las llamen”.

Al no estar aún autorizada para mayores de 60 años, la Sinopharm es destinada a docentes en 23 de las 24 jurisdicciones del país, según lo dispuso el Ministerio de Salud de Nación. Solo en CABA no es aplicada aún a ese grupo.

Consultado por este diario, Gabriel Battistella, subsecretario de Atención Primaria, Ambulatoria y Comunitaria de la Ciudad, dice que “con estas 30 mil dosis de Sinopharm, nos faltarán 20 o 30 mil más para terminar con el personal de salud”. Explica que ya no hay un filtro a la hora de vacunar a quienes se anoten para recibir la vacuna en River como autónomos: “El único escalón primario que se puso fue al principio, que eran 22.600 que trabajaban en terapia intensiva o que tomaban muestras de Covid. Después fue para todo personal de salud el acceso a la vacunación, siempre que esté activo”.

Más de 90 mil docentes y auxiliares ya se inmunizaron en Provincia. En CABA aún esperan, a pesar de haber sido los primeros en retornar a las aulas. Ya son al menos 178 maestras y maestros contagiados. “Las vacunas asignadas para la docencia deben ser para la docencia, no para profesionales autónomos de la salud que no son esenciales en esta etapa”, reclamó Eduardo López, secretario general de UTE–Ctera.

El equipo sanitario del Hospital Alvear (donde denunciaron que falta vacunar a más del 60%) elaboró un informe en el que releva unos 146.490 trabajadores de la salud y de geriátricos en la Ciudad: “Con las más de 220 mil dosis recibidas se debió vacunar a la totalidad del personal sanitario y quedar un total remanente de 74.735 vacunas para adultos mayores. Sin embargo, queda mucho personal sanitario sin vacunar. Resulta evidente que esas vacunas han sido desviadas y no se sabe exactamente dónde están. A eso se lo denomina clásicamente ‘mercado negro’. Los miembros de los equipos sanitarios que hemos expuesto nuestra salud y nuestra vida nos sentimos estafados por las autoridades sanitarias, que han perpetrado este incumplimiento de sus deberes de funcionarios públicos, y reclamamos a la población que levante su voz, porque la inevitable segunda ola resultará espantosa ante tan pésimo manejo epidemiológico. Nadie sale indemne de esta pandemia individualmente por estar vacunado. Ese razonamiento es ignorante y peligroso”.  «

¿Dos dosis o solo una?

Un estudio liderado por investigadores del Conicet bajo la coordinación del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires analizó la efectividad de la vacuna Sputnik V en cientos de trabajadores de la salud del sector público. Se constató que el 100% desarrolló anticuerpos específicos contra el SARS-CoV-2 tras recibir el esquema completo de dos dosis. Pero además, encontraron que aquellos que ya cursaron la enfermedad desarrollan una inmunidad aun mayor solo con la aplicación de la primera dosis, por lo que los especialistas a cargo del trabajo sugieren “revisar el esquema de vacunación para aquellos individuos que han sido previamente infectados con este virus”, ya que para ellos no sería necesaria la segunda dosis.

La médica de guardia que no creía en la Sputnik V

María Rosa Fullone (foto), médica de la guardia del Hospital Fernández, tenía 56 años. No solo fue víctima del Covid-19 y de los errores en el reparto y adjudicación de las vacunas por parte del gobierno porteño. También fue víctima de la desinformación respecto a la Sputnik V. No se había anotado en la primera tanda de inoculaciones de la vacuna rusa, y recién lo hizo en la segunda, tras la publicación del artículo de The Lancet que confirmó la alta efectividad de las dosis elaboradas por el Instituto Gamaleya (superior al 90 por ciento).

“Tenía turno para el 23 de febrero, pero se enfermó antes”, se lamentó Ignacio Previgliano, director del Fernández, y agregó que el remanente de dosis que había tenido el hospital (el gobierno porteño envía dosis a los establecimientos de acuerdo a la lista de personal de cada uno) se terminó repartiendo a otros centros de salud. El 20% de las y los trabajadores del Fernández no quisieron anotarse en la primera tanda, antes de que saliera la publicación internacional.

Comunicado

«Las autoridades sanitarias del país estamos más unidas que nunca», tuiteó la ministra Carla Vizzotti, luego de que se emitiera un comunicado conjunto firmado por todos los titulares del área de todas las provincias, incluido Fernán Quirós, por CABA, en respaldo al plan de vacunación. Sin embargo, el texto no se refiere a los criterios de distribución de las dosis, eje de la disputa con la Ciudad, y puntualiza que, más allá de ciertos consensos, el orden de prioridad de la aplicación lo decide cada jurisdicción.

Otro envío

El viernes, los fabricantes de la vacuna Sputnik V informaron que en el día de mañana, lunes, arribaría un nuevo lote con más dosis para el país, aunque no precisaron la cantidad. La semana pasada, dos aviones especialmente acondicionados de Aerolíneas habían traído 1,2 millones. Solamente ayer se distribuyeron unas 395.850 vacunas de origen ruso entre las 24 jurisdicciones.