Los «mellizos» Guillermo y Gustavo Barros Schelotto fueron confirmados como entrenadores de la selección de Paraguay por la Federación de Fútbol (FPF), en reemplazo del cuerpo técnico encabezado por su compatriota, el también argentino Eduardo Berizzo, que dejó el cargo tras la mala cosecha en la última triple fecha de Elimiantorias. Los Schelotto llegan con un contrato hasta la Copa América de 2024, que se disputaría en principio íntegramente en Ecuador.

La oficialización de la contratación estuvo obviamente focalizada en Guillermo, a través de un tuit de la FPF en el que se señalaba «Guillermo Barros Schelotto es el nuevo entrenador de la Albirroja. Bienvenido profe a la selección paraguaya». La llegada de los ex Boca se ve favorecida por una cláusula que ambos firmaron en su último trabajo en los Estados Unidos, cuando dirigieron a Los Ángeles Galaxy, por lo que a pesar de ser cesanteados no podrán dirigir a ningún equipo de su país natal, Argentina, ni tampoco de la Major League Soccer (MLS), hasta el 1 de enero de 2022, algo que les cerró las puertas de Racing, por ejemplo.

La aceptación de los técnicos platenses de 48 años constituye todo un desafío, ya que las chances de Paraguay de clasificarse a la Copa del Mundo de Qatar 2022 son bastante escasas, a partir justamente de la magra campaña desarrollada bajo el mando del «Toto» Berizzo.Los paraguayos ocupan el octavo lugar por diferencia de gol con Bolivia, ambos con 12 puntos, a cuatro unidades de Colombia (cuarto y clasificando directamente al Mundial) y Uruguay (en Repechaje), que suman 16 unidades, y con Chile en el medio (13).

Y justamente los chilenos deberán visitar a Paraguay el jueves 11 de noviembre por la decimotercera fecha de las Eliminatorias Sudamericanas, cuando podría producirse el debut de los «mellizos», para luego los «albirrojos» enfrentarse a Colombia como visitantes, el martes 16, por la decimocuarta jornada. Estos dos encuentros serán vitales para determinar el futuro en el camino a Qatar, porque esos seis puntos los dejarían bien posicionados para aspirar al menos al Repechaje, aunque el panorama es muy complejo.

La llegada de los Barros Schelotto a Paraguay se vio facilitada por el conocimiento que tienen en el fútbol de ese país especialmente de Gustavo, cuando éste fue ayudante de campo del técnico uruguayo Gregorio Pérez en sus exitosos pasos por Olimpia (2012) pero especialmente por Libertad, con el que se consagró campeón del Torneo Apertura 2010. Ese año «Goyo», extécnico de Independiente, Gimnasia y Esgrima La Plata, Argentinos Juniors y Olimpo, de Bahía Blanca, fue elegido como el mejor entrenador del año por la Asociación Paraguaya de Fútbol. Y Gustavo estaba a su lado.

Las como siempre explosivas declaraciones del arquero paraguayo José Luis Chilavert no frenaron la llegada de los surgidos de Gimnasia. «Los Barros Schelotto no tienen el currículum suficiente para dirigir a la selección», había dicho Chila, pero su opinión no pesó. Es la cuarta apuesta argentina en el banco de la selección guaraní en este siglo: en 2011 se fue Martino tras un gran ciclo y luego tuvieron su chance Ramón Díaz y el mencionado Berizzo.