“La competitividad no pasa únicamente por modificar el tipo de cambio”, lanzó el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, a un auditorio repleto de empresarios del sector agropecuario reunidos en el foro Argentina Visión 2020/40, que se realizó hoy en la sede del Ministerio de Ciencia y Tecnología de la  Nación. 

El ámbito primario de la economía fue uno de los sectores que más rápidamente se beneficiaron con las políticas del gobierno nacional, que a poco de asumir dejó sin efecto las retenciones, eje del extenso conflicto que mantuvieron las patronales agrarias con la presidencia de Cristina Fernández, en 2008. 

Hoy por hoy el campo forma parte de un empresariado que exige medidas de fondo que generen condiciones para invertir capitales en el país. Una de esas medidas tiene que ver con la modificación del tipo de cambio pero el hombre del gabinete nacional moderó la importancia del reclamo. 

Para Buryaile “no es la modificación del tipo de cambio” la única vía para hacer más competitiva la producción argentina: “también es desburocratizar el Estado, avanzar hacia la eficiencia de los recursos, hacia el fin de la corrupción y hacia la implementación de la tecnología” a los procesos productivos. 

El funcionario, que compartió un panel con el ex ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, abogó a su vez por “transparentar la cadena” agropecuaria, donde “existe una enorme informalidad”, señaló. 

A la par, planteó la necesidad “transformar” el SENASA: “Disminuimos los costos, ahora necesitamos modificar el Convenio Colectivo de Trabajo con el SENASA” en el marco de “un acuerdo” con todos los actores del sector. 

Buryaile también aseveró que “necesitamos una ley de semillas para proteger la propiedad intelectual” y  adelantó el lanzamiento de un seguro con cobertura para los productores que se empezará a aplicar en el maíz como prueba piloto con expectativa de seguir luego con la soja. 

A su turno, Prat Gay, advirtió: “Si satisfacemos a todos los sectores el Estado se quedaría sin funcionamiento”. Y abogó por “profundizar el camino con acuerdos y consensos básicos para llevarlos a cabo después de las elecciones”. 

En esa línea, resaltó que tras el compromiso electoral, “el año que viene se empiezan a discutir las cuestiones más importantes, como la reforma tributaria”. 

Las declaraciones de esos referentes estuvieron en línea con las del jefe de Gabinete, Marcos Peña, en la apertura del foro. 

Peña apeló al compromiso del auditorio cuando recordó que al asumir el gobierno “hubo una apuesta muy grande al sector agropecuario, que fue el primero en responder, invertir y ser el motor de desarrollo del crecimiento argentino”. A continuación, defendió que, un año después de las primeras medidas, “empezamos a ver los frutos” y reclamó que “tenemos que definir si somos la generación que va a cambiar a la Argentina para siempre o si este va a ser un capítulo más de frustración en nuestro país”.