El fideicomiso del trigo que el gobierno lanzó el fin de semana pasado para desacoplar el precio local del precio internacional quedó rápidamente desactualizado por la fuerte suba en los mercados globales en el contexto de la guerra entre Rusia y Ucrania. El promotor de la política, el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, lo reconoció al día siguiente de la publicación de la Resolución Conjunta 3/22, y dejó abierta la posibilidad de actualizar el texto.

En la semana, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, declaró que se propondrá un «refuerzo» del fideicomiso, pero no dio mayores precisiones. También habló de la posibilidad de acompañar ese recurso con medidas adicionales, pero tampoco mencionó detalles.

Informalmente se volvió a considerar la posibilidad de aumentar las retenciones a las exportaciones. En el gobierno definieron la situación de fondo como «urgente y dramática» y agregaron: «El fideicomiso, tal cual fue constituido e ideado, es insuficiente porque se hizo con una tonelada de trigo a un precio que no tiene nada que ver con el actual».

Sin embargo, las fuentes no brindaron detalles de medidas puntuales. «Las discusiones sobre las medidas a tomar se están dando –aseguraron–, pero todavía no hay nada definido. Lo que sí está claro es la conciencia de todos los actores del gobierno sobre la desactualización del fideicomiso».

Mientras tanto, los aumentos minoristas siguen escalando como consecuencia, entre otras cosas, de las variaciones internacionales de precios.

Focus Market informó que aumentó un 14% el costo financiero y otro 9,3% los combustibles, dos variables que impactaron en el costo del flete y que inevitablemente encarecieron los precios en las góndolas.

A la espera del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que el Indec publicará el martes próximo, las consultoras privadas vaticinan que la inflación de marzo rondará el 4 por ciento.

En la segunda semana del mes, la consultora LCG midió un aumento minorista de los alimentos del 1,6% intersemanal, con mayor incidencia de los panificados, que subieron un 4,8%, fogoneados por la suba del trigo; y las carnes, que aumentaron un 1,8%. En este último precio también impactan las subas internacionales de los alimentos para el ganado.

Descontentos

El viernes a última hora, la Mesa de Enlace, que reúne a las patronales del agro, publicó un comunicado en el que rechazó de plano la implementación del fideicomiso que impulsa Comercio Interior.

El texto se plantó en primer lugar contra la posibilidad de que el gobierno aumente las retenciones a las exportaciones de trigo y maíz, de acuerdo a los rumores que circularon desde la primera hora del viernes.

En el mensaje, la entidad manifestó su «férreo rechazo» a las retenciones porque «no hay ningún margen para que sigan expoliando a los productores».

Al promediar el texto, la central agraria cargó contra «cualquier otra intervención distorsiva en los mercados» que «no combaten la inflación ni la pobreza». Y remarcó: «Rechazamos y combatimos la idea del fideicomiso, por lo que nos oponemos por considerarlo improcedente y contrario a los objetivos que dice perseguir».

Hasta el día anterior, antes de la votación del acuerdo con el Fondo Monetario en la Cámara de Diputados, los patrones del campo prefirieron mantener el perfil bajo y no respondieron preguntas sobre el fideicomiso. Un día después mostraron una posición enérgicamente contraria al instrumento y agitaron indirectamente la posibilidad de volver a un lockout similar al del conflicto por la Resolución 125 de 2008.

Panaderos movilizados

Otro sector movilizado es el de los industriales panaderos. El jueves las entidades que representan a esas empresas, en su gran mayoría pymes, se reunieron en Merlo para definir medidas. El titular del Centro de Panaderos de Avellaneda, Gastón Mora, contó a Tiempo que el martes a las 14 habrá una marcha al Ministerio de Producción para reclamar políticas para contener los precios de la harina.

Este sector del comercio minorista también amenazó con posibles medidas de fuerza, como un paro de la producción en reclamo de «reglas claras» para el mercado interno. En este caso, la protesta pide al ministro Kulfas un llamado para buscar una solución de conjunto.

La agencia estatal de noticias Télam consignó que la Federación Argentina de la Industria del Pan y Afines (FAIPA) convocó para mañana una reunión con filiales de todo el país para analizar los pasos a seguir frente a la suba de precios.

Télam también informó que Raúl Santoandré, presidente de la Federación de la Industrial Panaderil de la provincia de Buenos Aires, dijo que la bolsa de harina de trigo 000 de 25 kilos cuesta entre 2000 y 2500 pesos y que «el trigo aumentó 21% y la harina 29%, hay casi un 8% de especulación que nos cobraron de más sobre lo que sería el aumento del trigo», cuestionó. «