Las inversiones de las empresas siguen sin aparecer y, según dicen los propios empresarios, por ahora no asomarán en los niveles que espera Balcarce 50. En cambio, las razones para que demoren abundan: que no están las condiciones, que faltan medidas de ajuste fiscal, que los costos logísticos son altos, que el tipo de cambio está atrasado, y un largo etcétera.

El gobierno insiste con los pedidos de respaldo, privilegia el trato con los empresarios que toman las decisiones importantes y recorre todos los foros posibles para seducir el interés de los hombres de negocios. Hasta acá no cosechó más que frases de aprobación y poses de buena voluntad pero sabe diversificar sus recursos.

El martes en el Hotel Alvear Palace la encargada de trasladar el pedido fue la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal. La funcionaria aprovechó el almuerzo que organizó en su homenaje el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CICyP) para convocar a los popes corporativos a integrar lo que definió como el equipo de los 16 millones de bonaerenses.

En ese grupo «ustedes están entre los que pueden dar un poquito más», diferenció Vidal antes de ponerse al frente del reclamo: «Necesito que se sumen a este equipo todavía más. Muchos han invertido en la provincia, pero necesitamos más.»

Ante un centenar de mesas a las que se sentaban más de 400 referentes del mercado que pagaron entre 5000 y 7000 pesos por cubierto, la mandataria bonaerense admitió que «necesitamos más muestras de que confiamos en nosotros mismos», y apeló a la sensibilidad del auditorio con una interpelación directa: «yo confío en que ustedes, cuando llegan a sus casas, se dicen a sí mismos ‘di todo más allá de de mi rentabilidad de este año o el año que viene'».

Tras la comida, en los pasillos del Alvear se escucharon voces disonantes, como la de Eduardo Eurnekian (ver aparte) o la del salteño José Urtubey. Este empresario destacó las figuras de Vidal y su equipo de trabajo pero planteó que en el caso de la provincia «hay necesidad de una macroeconomía que dinamice el mercado interno sobre todo pensando en las pymes».

Adrián Werthein, hombre del grupo homónimo, titular del CICyP y organizador del homenaje se manifestó de acuerdo con la necesidad que manifestó Vidal y reconoció que las inversiones no se están produciendo al nivel esperado (ver aparte), pero condicionó un posible cambio de rumbo a la realización de «ajustes en lo fiscal y en los costos logísticos que anticipó el presidente (Mauricio) Macri».

El expresidente de la Cámara de la Construcción (Camarco), Juan Chediack, también le dio la razón a Vidal. Para el empresario «lo que dijo la gobernadora es una gran verdad, realmente faltan inversiones genuinas para generar trabajo», sin embargo justificó: «las condiciones en Argentina siempre fueron complicadas».

Chediack, referente del sector que muestra señales de reactivación impulsado por la obra pública, llamó a sus pares a responder al llamado de la gobernadora: «no podemos esperar a que lleguen las condiciones. Alguna vez tenemos que empezar si queremos colaborar con el país y la sociedad. Nuestro esfuerzo tiene que estar en invertir y no subir los precios», concluyó el constructor.

El mismo día del almuerzo que no pocos leyeron como un lanzamiento virtual de María Eugenia Vidal como candidata a la presidencia de la Nación (la publicidad del CICyP lo anunció con el título «Alta en el cielo», cruzando a la gobernadora con la bandera nacional), la Unión Industrial Argentina (UIA) presentó a su nuevo cuadro directivo con reclamos de un mercado interno «robusto» y políticas de administración del comercio exterior que favorezcan a la producción local. En conferencia de prensa, el nuevo titular de la entidad, Miguel Acevedo, criticó las condiciones económicas al afirmar que «hay una recuperación amarreta», y le apuntó a la falta de políticas para contener los precios cuando consideró «importante volver a tener inflaciones normales para que el sueldo (de los trabajadores) alcance».

De esa manera los industriales justificaron la decisión de resguardarse en lugar de invertir como espera el gobierno. También alertaron sobre los costos logísticos y ratificaron la lista de políticas fiscales que presentaron en diciembre de 2016 como sugerencia para el ajuste que el gobierno pospuso para el año que viene, con el objetivo de que no le embarre la cancha en el marco del año electoral. «