Desde las 20 y durante varias horas, en cientos de esquinas de todo el país, la gente se hizo escuchar. Los aumentos desmedidos y la situación crítica que golpea muy fuerte el bolsillo, provocaron que las calles se poblaran de personas que, haciendo ruido con lo que tenían a mano, con carteles que evidenciaban el malestar, volvieron a dejar en evidencia el sentimiento de gran parte de la gente.

Las Multisectoriales en Redes contra el tarifazo llamaron a un nuevo ruidazo en todo el país contra el aumento desmedido de los servicios y la renuncia del ministro Juan José Aranguren. La primera medida contra el gobierno de Mauricio Macri se produjo el 14 de julio en rechazo a las subas de agua, luz y gas. Después del primer impacto en esquinas, plazas y diferentes puntos de encuentro, la misma se extendió en redes sociales alcanzando asociaciones de consumidores, vecinos autoconvocados, clubes barriales, cooperativas, gremios y sindicatos, entre otros. Este jueves, en ese sentido, se convocó a una segunda expansión de protesta sonora: silbatos, cornetas, bocinas y objetos que permitieron hacerse oír. Además se propusieron las cadenas virtuales con los hashtags: #NoAlosTarifazos y #ChauAranguren.

La medida promovida por las 54 multisectoriales, por otra parte, intenta que el reclamo no quede fuera de agenda. La jueza federal de San Martín, Martina Forns, dispuso en su fallo que queden sin efecto las resoluciones nro. 6/2016L, 7/2016 del Ministerio de Energía y Minería de la Nación y 1/2016 del ENRE, y ordenó a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrica (CAMMESA) «que se abstenga de aplicar el nuevo cuadro tarifario aprobado por la primera de las resoluciones citadas, respecto de todas las distribuidoras del país, hasta tanto no se realice la correspondiente audiencia pública». Es decir, el pronunciamiento solicita suspender el cobro de las facturas emitidas y liquidar las vigentes con anterioridad a las resoluciones.

Los puntos de concentración para la jornada de protesta contra la inflación y para frenar los aumentos desmedidos de los servicios públicos fueron trazados para la provincia de Buenos Aires, por la CTA de los trabajadores. Para la Ciudad de Buenos Aires, el epicentro fue el Obelisco, sin excluir esquinas espontáneas de manifestación de la protesta y plazas, mientras que hubo una fuerte repercusión de multisectoriales y autoconvocados en la grilla de parques en el interior del país.

En términos de golpes económicos, el ruidazo refirió al aumento de tarifas de servicios eléctricos, potables y de gas natural, además de subas de transportes, lo que afecta el poder adquisitivo de los ciudadanos y el desaceleramiento de las paritarias.