Hasta el 26% aumentaron los precios de los cortes de carne vacuna en febrero, según mediciones que anticipan (y quizás preanuncien) la medición nacional del Indec, que se publicará el 14 de marzo.
Los precios venían de un primer salto en los últimos días de enero, que precedió al lanzamiento del programa oficial Precios Justos Carne, una lista de siete cortes de venta masiva con precios 30% inferiores a los de mercado y con el beneficio adicional de reintegros del 10% para compras con tarjetas de débito.
Tras el aumento de febrero, la industria cárnica anticipa que la tendencia seguirá siendo alcista los próximos meses, en contraste con un 2022 en el que los precios de la hacienda, y por contigüidad los que se cobran al consumidor, crecieron por debajo de la inflación.
El año pasado, los precios aumentaron 42% y la inflación fue del 94,8%, comparó a Tiempo el titular de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra), Miguel Schiariti. El empresario dijo que el sector considera que el movimiento de los precios tiene “total normalidad”, considerando la brecha que se consolidó el ciclo pasado.
“Hubo un atraso en los precios porque se adelantaron las ventas y la producción por la sequía. El productor sin pasto tuvo que engordar los animales a corral, un proceso que demora la mitad del tiempo. Eso hizo que hubiera un aumento de la oferta en los últimos meses del año impactando en el estancamiento de los precios”, señaló el referente.
Y agregó que desde fines de enero los feedloteros informaron la finalización de esa oferta y que los precios del kilo vivo se dispararon, pegándole de lleno a los precios al consumidor.
Los datos de Ciccra dicen que, en febrero, el precio de la hacienda en pie “quedó ubicado en $380,5 por kilo vivo, es decir 27,4% arriba del promedio de enero y 51,2% por encima del promedio correspondiente a noviembre de 2022”, y remarcan que lo acumulado sigue por debajo de la inflación acumulada anualmente.
En la segunda semana de marzo, sin embargo, los precios se retrotrajeron el 12% porque la demanda, los frigoríficos, no estaban dispuestos a pagar el costo de un animal. Schiariti sumó que se aprecia un desmejoramiento cualitativo de la hacienda y una fuerte dispersión del precio mayorista.
A futuro, el pronóstico no mejora: “La sequía va a continuar y es esperable que continúe lo que estamos viendo con los precios. Además, 30 días después de la sequía, el productor va a retener, y ahí vamos a tener un nuevo aumento de precios”.
En forma simultánea, cayó también el consumo de 47,46 kilos por habitante por año en 2022 a 44,6 kilos por habitante por año en febrero de 2023, un bajón que el titular de Ciccra asoció a la inflación, más allá de la caída que experimenta desde hace 10 años el consumo cárnico de los argentinos.
Mediciones
Esta semana, mientras los consultores privados anticipaban los números de inflación de febrero, el gobierno fiscalizaba el abastecimiento del programa de carnes en los comercios adheridos, que según denuncias de consumidores y los propios controles de la Secretaría de Comercio, presentaban casos de desabastecimientos.
Esos faltantes agravan uno de los puntos negativos del plan: como pasa con Precios Justos, la comercialización de esta versión está concentrada en las grandes cadenas de supermercados, con el agregado de algunas carnicerías, lo que dificulta el acceso del público masivo a la propuesta.
Respecto de los precios, Ecolatina midió en febrero una inflación del 6,6% (105,5% acumulado) y un aumento de la carne vacuna del 25,8% respecto a enero.
El Isepci, del movimiento Libres del Sur, calculó una suba de las carnes del 24,55% en localidades del conurbano bonaerense en el marco de una canasta alimentaria de 57 productos cotejada en 900 comercios.
El IET Umet CCD del Instituto Estadístico de los Trabajadores calculó una inflación del 6,3% (101,8% acumulado) y del 8,9% de las carnes.
Y el gobierno porteño, en su IPCBA, reportó una inflación del 6% y del 15,2% en carnes y derivados.
En la primera semana de marzo, LCG midió una suba del 0,92% para la carne, que aportó a un acumulado del 11,4% desde la primera semana de febrero. «
