El juicio por el caso de abuso más antiguo del país llegó este miércoles a una etapa final con los alegatos de la querella y la defensa. 

Se trata de la causa Pacce Alvarado, el matrimonio chaqueño que cometió delitos de abuso y corrupción de menores contra su sobrina Rosalía Alvarado y Belén Duet, hija de un matrimonio amigo entre 1979 y 1986, cuando las niñas tenían entre tres y cinco años.

«Busqué mucho llegar a este juicio, llegar a la justicia, necesitaba que la justicia diga que esto que nos pasó fue real y que se tiene que condenar. Esto no puede quedar impune», dice a Tiempo Argentino, Rosalía. 

El juicio, al que pudieron acceder gracias a la Ley de Respeto a los Tiempos de las Víctimas de delitos contra la integridad sexual, comenzó el 10 de mayo, y a lo largo de las jornadas pasaron más de 15 testigos ante la Cámara Tercera en lo Criminal de Chaco, presidida por Ernesto Azcona, e integrada por Virginia Ise y Natalia Kuray. 

«Escuchar a otros testigos fue muy movilizador tanto los que declararon de mi parte como la de Belén. Sus testimonios fueron muy reparadores también para escucharlos y me sensibilizaron mucho, en especial el de mi hermano, con el que yo hablé de grande, me sensibilizó mucho su dolor», relata Rosalía quien eligió escuchar cada jornada. «También me sensibilizó mucho escuchar a la hermana de Belén, fueron testimonios sanadores. Los testimonios de la otra parte fueron de mucha agresión, pero era lo que se esperaba».

La etapa de alegatos prevista para este miércoles se vive con expectativas por parte de las víctimas. «Hay muchos testimonios que acreditan perfectamente que Belén y yo fuimos víctimas de este delito tan atroz y que los perpetradores son Daniel Pache y Noemí Alvarado. Nosotras esperamos ver reflejado esto en los alegatos porque las pruebas son muchas. Después tendremos que esperar que haya una sentencia que yo deseo con toda mi fuerza, que sea una sentencia reparadora y justa, que esté a la altura del horror por el que nos hicieron pasar».

Por su parte, la abogada Nahir Barud que junto a Kevin Nielsen está a cargo de la querella, afirmó a Télam, «este es un juicio muy trascendente por los años que han pasado. La justicia chaqueña está a un paso de marcar un precedente nacional, provincial e internacional». 

La denuncia fue un impacto en Chaco ya que se trataba de un matrimonio reconocido. Noemí Alvarado era maestra y Daniel Pacce (murió en 2018) fue integrante del directorio del Instituto de la Vivienda y diputado.

Fue el movimiento de mujeres quienes acompañaron a Rosalía y Belén, pero la sociedad chaqueña también se solidarizó con las mujeres. «Acá en Chaco hemos recibido mucho apoyo. Este es un delito muy silenciado, un delito del patriarcado que se alimenta del silencio, de la culpa. Nosotras tenemos un acompañamiento desde ese dolor que padecimos muchas, en silencio, sin poder hablar. Estoy esperanzada en que haya justicia por nosotras y por todos. Llegamos hasta acá porque no estuvimos solas, porque cuando hablamos de la lucha empezó a ser colectiva». 

Como cada audiencia, Rosalía espera escuchar los alegatos de este miércoles. «Necesito estar presente para escuchar cada testimonio. Yo espero que esta sentencia sea condenatoria, sea reparadora, no sólo para nosotras, para Belén y para mí, que denunciamos en este caso, sino para todas las víctimas de este delito tan atroz, tan terrible, que te quiebran la infancia cuando te están constituyendo». 

«Queremos que este caso –concluye– marque el precedente de que el Estado argentino condena estos crímenes. No importa la edad, no importan los años que hayan pasado. Esto tiene que ser condenado. Y eso es lo que deseamos y lo que esperamos para todos».