Cuando las y los docentes en Argentina deciden hacer paro en reclamo de mejores condiciones laborales, se los suele acusar de ser los responsables de la pérdida de días de clases, dejando de lado su derecho a tal protesta. Sin embargo, una encuesta expuso que no son los paros los que motivan la mayor cantidad de días sin cursada en las escuelas primarias. En cambio, el motivo más mencionado fueron las jornadas pedagógicas. Por eso, especialistas plantean la necesidad de que el tiempo de contratación de docentes contemple cuestiones que excedan al horario del aula.

Así se desprende de una encuesta nacional a madres sobre las interrupciones en el calendario escolar de sus hijos e hijas, en primarias públicas y privadas. Según los resultados de la Encuesta Nacional Escolar, el 60,8% dijeron que sus hijes perdieron días de clase en el primer semestre de este año.

Las jornadas pedagógicas son señaladas como el principal motivo de pérdida de clases (31%), seguidas por los paros docentes (28%) y los problemas climáticos (13%). La interrupción de la continuidad escolar fue mayor en las escuelas estatales (donde el 75,8% de las familias reportan interrupciones) que en las escuelas de gestión privada (donde la cifra es menos de la mitad: 34,1%).

Los datos surgen del informe “Continuidad escolar: pérdida de días de clases durante el primer semestre de 2022”, del Observatorio de Argentinos por la Educación, con autoría de Guillermina Tiramonti (FLACSO Argentina), Gabriela Catri y Eugenia Orlicki (Observatorio de Argentinos por la Educación). El informe se basa en la Encuesta Nacional Escolar (ENE), realizada en julio a una muestra representativa de 500 madres de todo el país con hijos en la escuela primaria.

“Se les pide a los docentes trabajar en equipo, pero para hacerlo hay que suspender las clases. El sistema atrasa en todo; no solo es el currículum, sino también la organización y gestión para la mejora de los aprendizajes”, planteó María Cristina Gómez, directora de la Red de Educadores Innovadores, según el informe difundido por Argentinos por la Educación.

“La diferencia se debe fundamentalmente a los paros docentes. Se da más en las estatales porque las privadas logran controlar esto porque, probablemente, hay consecuencias negativas para los docentes que hacen paro. La ausencia de los docentes es más por las jornadas escolares de capacitación que no deberían quitarles tiempo de clase a los alumnos, porque eso debería estar fuera del tiempo de la clase”, dijo Guillermina Tiramonti en diálogo con elDiarioAR, y detalló que Argentina es uno de los pocos países de la región que tiene un método de contratación que no contempla las horas de trabajo institucionales para docentes. Así, el tiempo de capacitación repercute en la pérdida de clases.

“Necesitamos abordar el tema de fondo: el sistema y la carrera docente. La autonomía escolar de la que siempre hablamos, entre otras cosas, permite contar con el personal a tiempo completo, con una organización del trabajo frente al aula y en el resto de las tareas que hacen sostenible y eficiente el sistema sin que los alumnos pierdan horas de clase”, concluyó Gómez.