El gobierno decidió ascender al único gendarme imputado en la causa por la muerte de Santiago Maldonado. Patricia Bullrich decidió promover al subalférez Emmanuel Echazú, entre un grupo más grande de ascensos, “no existiendo impedimentos para su promoción al grado inmediato superior”, según consta en la resolución 1473/2017, que se publica este miércoles en el Boletín Oficial.

Se trata del gendarme que reviste en el escuadrón 36 de El Bolsón, quien declaró haber recibido un piedrazo durante el operativo en la Pu Lof Resistencia de Chushamen en cuyo marco se produjo la muerte de Maldonado. Echazú declaró ante la Justicia que recibió un piedrazo al borde de la ruta 40, en la entrada a la comunidad mapuche, antes de ingresar al territorio. Cabe recordar que también es el uniformado que utiliza Gendarmería para acceder al expediente.

La familia Maldonado a través de su página oficial expresó que la decisión es “como mínimo prematura porque se encuentra en curso una investigación sobre la responsabilidad de ese y otros agentes en un caso gravísimo como el de la desaparición y muerte de Santiago”.

Además critican que el ascenso en estas condiciones “resulta impropio y desaconsejable, ya que podría suponer cierto aval a prácticas represivas ilegales y una provocación a los familiares de las víctimas”. El texto culmina exigiendo que “la resolución sea revocada en cuanto a los gendarmes bajo investigación”. 

Más tarde, familiares y amigos de Santiago hicieron el miércoles por la noche una movilización en repudio a la decisión de Bullrich en la localidad de 25 de Mayo, donde el joven nació.

La lesión de Echazú fue utilizada por el gobierno para insistir en que hubo un “delito en flagrancia” frente al cual Gendarmería entra sin orden judicial a la Pu Lof. En todo caso, según los dichos del propio gendarme, este recibió la herida recién al intentar ingresar a la comunidad con lo que el ingreso a la comunidad fue decidido antes de que fuera herido.

Las declaraciones del ahora alférez, entran en contradicción con las de sus compañeros de menor rango. Por eso, aún resta investigar, contrastar y llegar al escenario verdadero en el que se produce la muerte de Santiago. En este marco, la “doctrina Bullrich” es que la actuación de Echazú debe ser premiada más allá de las dudas, de los puntos oscuros que debe iluminar la Justicia, de que está imputado en una causa de “desaparición forzada” (carátula que mantiene luego de que el juez Gustavo Lleral rechazara el cambio a “Muerte dudosa” presentado por la fiscal Silvina Avila).