El Gobierno porteño anunció este lunes que el permiso de circulación para que los adultos mayores de 70 años es finalmente «una sugerencia» para minimizar en lo posible que esa franja de la población salga de su casa frente a la pandemia del coronavirus.

La medida fue publicada este lunes en el boletín oficial de la Ciudad y establece que “a los efectos de garantizar el conocimiento de todas las alternativas puestas a disposición por parte de la Ciudad, para evitar que las personas de setenta (70) o más años salgan innecesariamente de su domicilio o lugar en el que se encuentren cumpliendo el aislamiento social, preventivo y obligatorio, establécese la necesidad de comunicarse previamente con el servicio de atención ciudadana al número 147”.

El aviso para circular tendrá una validez de 48 horas y quedan exceptuados de cumplir que este normativa todas las personas que cumplen tareas esenciales. Tampoco deberán tramitarlo para cobrar jubilación, tratamientos médicos programados o para recibir las vacunas del calendario.

En rigor, la iniciativa apunta a minimizar las salidas a la calle de los 490.000 adultos mayores en esta franja etaria.

“Esta iniciativa no intenta quitar autonomía. Esta política pone el Estado a disposición de este subgrupo de personas que queremos cuidar y ellos van a decidir lo que van a hacer”, aclaró este lunes el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, durante una conferencia de prensa que compartió con el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta.

Quiróz detalló luego los alcances de esta decisión. “Primero les pedimos que no salgan, hablen con sus afectos, vincúlense con los voluntarios. Y si consideran que tienen que salir, dennos la oportunidad de hablar, de entender por qué necesitan salir, de intentar resolver el problema. Y si considerás que lo que te ofrecemos no te resuelve el problema entonces tendrás toda la libertad para salir y hacer de tu actividad lo que vos consideres”.

Al respecto, el jefe de gobierno porteño señaló que es una “decisión guiada por criterios sanitarios, que tiene que ver con cuidar la vida de los vecinos de la ciudad de Buenos Aires”, y agregó: “Yo no elijo a quién ataca la pandemia, en Europa 8 de cada 10 muertos son mayores de 7, y el promedio de edad en la Argentina es de 71, además es predecible que aumente la circulación en las calles”.

Además, destacó que hasta las 8 ya habían recibido 3500 llamados telefónicos, la cantidad que suelen recibir en todo un día.  

La medida fue muy criticada desde su anunció la semana pasada. El especialista en la tercera edad Eugenio Semino la calificó de «anacrónica» y «absurda» al considerar que la franja de la población que supera los 70 años no tiene una «minusvalía». El filósofo y profesor José Emilio Burucúa, de 73 años, consideró una «arbitrariedad» y una «escandalosa discriminación». Luego se sumaron también intelectuales que superan los 70 años de edad, quienes a través de una carta consideraron que la decisión los convierte en «en objeto de discriminación y maltrato bajo la excusa de una pseudoprotección».

Por su parte, el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, dijo al canal América que le consta que la intención del gobierno porteño con esta medida ha sido «proteger a sus habitantes». «Rodríguez Larreta vino oportunamente con una preocupación casi obsesiva» sobre los adultos mayores de 70 años, dijo el ministro. «Las víctimas fatales por coronavirus están en esa edad y me consta que la decisión del gobierno porteño tiene que ver exclusivamente con el cuidado» de los adultos mayores, agregó Ginés.