Finalmente, Pablo Moyano llegó al país y fue recibido por un nutrido grupo de dirigentes gremiales y militantes de Camioneros luego de que se rechazara el pedido de un fiscal para detenerlo en una causa que investiga delitos cometidos en Independiente.  

El secretario adjunto de Camioneros y vicepresidente del club de Avellaneda habló al regresar de Singapur, donde asistió a un congreso de la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte, y denunció que se trata de un ataque del gobierno nacional por oponerse a la actual política económica.

«Queda claro que fue un ataque mediático y judicial, pero quiero agradecerle a mis compañeros camioneros, que siempre han estado en cada momento», sostuvo en el predio ubicado en La Horqueta y Ricardo Newton, en la localidad de Esteban Echeverría, donde realizó un breve acto.

Moyano cargó contra el procurador bonaerense Julio Conte Grand por haber filtrado la causa e impulsar el pedido de arresto que hizo el fiscal Sebastián Scalera en su contra.

“Fíjense cómo utilizaron a través de Conte Grand y a través de (el periodista, Luis) Majul, a este payaso de Scalera que ni la pinta lo ayuda”, aseguró y manifestó que va a estar «al frente de cada conflicto de los trabajadores, sea del sector que sea».

«Como dijo mi padre (Hugo Moyano), somos el muro de contención de todas estas políticas del Fondo Monetario Internacional», concluyó.

Junto a Pablo estuvieron su padre Hugo, quien advirtió que «atacando a Pablo están atacando a todos». También estuvieron presentes los secretarios generales de La Bancaria, Sergio Palazzo; y del Sindicato de Canillitas, Omar Plaini, quienes integran junto a Moyano la agrupación Multisectorial 21F.