La vida en la Ciudad de Buenos Aires es más desigual ahora que tres años atrás. En este período la pobreza creció en un 54% y la indigencia se duplicó. Pero estos flagelos no afectan de manera uniforme a la CABA: la mayor parte de ese incremento se dio en la zona sur de la ciudad.

Estos datos se desprenden del estudio “La Ciudad en deuda. 2019”, elaborado por el Centro de Estudios de Ciudad (CEC), que depende de la Universidad de Buenos Aires (UBA), y que fue dado a conocer este miércoles.

En números absolutos, en los últimos tres años pasaron a situación de pobreza 220 mil personas en el territorio controlado por el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta. De estos, 100 mil cayeron en la indigencia.

Adriana Clemente, directora del CEC señaló que en el período en que se dio este incremento de la población en situación de pobreza e indigencia, el crecimiento vegetativo de la población fue prácticamente nulo, por lo que el salto se debió se explica “por efecto de las políticas recesivas tanto del gobierno nacional, como por la falta de políticas pro cíclicas (anti crisis) por parte del gobierno de la jurisdicción más rica del país”.

En ese sentido, indicó que “hoy el gobierno de la CABA lleva adelante una agenda que desconoce el aumento de la demanda social a causa del empobrecimiento de su población”, al tiempo que el interés gubernamental se centra en la “transformación física” de la urbe en sintonía con “un plan de negocios”.

Inés Albergucci, licenciada en Trabajo Social, docente de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA e investigadora del CEC, desarrolló una parte del estudio. Titulado “Una ciudad, dos realidades”, Albergucci revela los datos del segundo informe de monitoreo de datos socio-económicos de la Ciudad de Buenos Aires. En base a cuatro dimensiones, elabora una profunda radiografía de la crítica situación social y económica que viven centenares de miles de habitantes de la Capital Federal.

La primera de estas dimensiones es el mercado del trabajo. El promedio de la tasa de desocupación es del 9,4%, pero este dato encubre dos realidades totalmente diferentes. En la zona sur de la ciudad (comunas 4, 8, 9 y 10) la desocupación alcanza al 13,1% de la población económicamente activa en el tercer trimestre de 2018 mientras que en la zona norte (comunas 2, 13 y 14) llega al 5,6%.

Pero, al mismo tiempo, la distancia entre ambas zonas se agiganta. Mientras que entre 2008 y 2014, la diferencia en la tasa de desocupación entre el norte y el sur de la Ciudad no superó los 3,4 puntos porcentuales, desde 2015 esos niveles se disparan hasta llegar a 7,5 puntos porcentuales.

Esta situación laboral determina la dinámica de la segunda dimensión: la pobreza e indigencia. Alcanza al 14,7% de los hogares porteños, lo que equivale a una población de 639.000 personas: una de cada cinco personas en la Ciudad es pobre. Este nivel es un 54% superior al que existía tres años atrás.

Respecto de la indigencia, pasaron de 100 mil personas en el tercer trimestre de 2015 a 198 mil personas en el mismo período de 2018. Es decir, se duplicó.

Vinculado a este punto, Agustín Mario, doctor en Ciencias Sociales, docente universitario e investigador del CEC, elabora la segunda parte del informe (titulada “Pobreza extrema y desigualdad en la Ciudad de Buenos Aires”) y complementa el informe de Albergucci.

Su análisis se detiene en cinco puntos:

-La (casi) duplicación de la pobreza extrema (un aumento de 3,2 puntos porcentuales).

-La mayor parte de ese incremento tuvo lugar en la zona sur de la ciudad, paradójicamente la de mayor nivel de indigencia.

-La indigencia aumentó más en el grupo etario de mayor nivel de pobreza extrema (0 a 14 años).

-Mientras que en 2015 el 10% más rico tenía un ingreso de 17 veces el del 10% más pobre, en 2018 dicha brecha se amplió a 25 veces.

-El ingreso creció más en la zona de mayor nivel de ingreso (norte), y menos en la zona de menor nivel de ingreso (sur), incrementándose las diferencias zonales de ingreso en la ciudad.

Salud y educación

El informe de Albergucci se completa con dos dimensiones más: salud y educación. Respecto de la primera, observa que la tasa de mortalidad infantil en la zona norte de la ciudad es del 4,7% mientras que en la zona sur alcanza al 7 por ciento.

Al mismo tiempo advierte que la tasa creció de manera “exponencial” en la zona centro de la ciudad, “en comunas donde antes el problema no era tan significativo”.

La diferencia entre norte y sur, con todo, sigue cristalizada. Así, la tasa de mortalidad infantil de la comuna 8, en la zona sur, del 8,9% en 2017, más que duplica las de la comuna 2.

En materia educativa, el trabajo de Albergucci indica que “el porcentaje de alumnos con sobreedad para el nivel primario es del 10,3% en la Comuna 8, mientras que en la Comuna 13, los barrios de Núñez, Belgrano y Colegiales es de 3,3%. En el nivel secundario, las Comunas 4 y 8 presentan una tasa de sobreedad del 39%, muy por encima de la media de la Ciudad que es de 26,9 por ciento”.