La decisión del oficialismo es evitar la confrontación y pagar el menor costo político frente a la instalación de la Emergencia Alimentaria por parte de los movimientos sociales y los distintos bloques parlamentarios peronistas que hoy conforman el Frente de Todos.

Ni bien el texto que extiende la Emergencia Alimentaria hasta el 2022 y aumenta la posibilidad de reasignar partidas para atender la demanda de comedores y merenderos consiguió la media sanción de la Cámara Baja, Federico Pinedo, hombre fuerte del PRO en el Senado, pidió una sesión especial para el próximo miércoles con el fin de abordar el proyecto. 

El acuerdo que sirvió como marco para la sesión del jueves pasado en Diputados se replicará en el Senado. No habrá debate, sólo exposiciones breves, y se tratará de evitar que haya cruces. Bajo esa lógica, Cambiemos se comprometió a no bloquear la iniciativa.

La decisión de acompañar el proyecto causó malestar en los sectores más duros del PRO. Sin embargo, la posición del Ejecutivo no admitió discusión ni fue puesta a consideración. En Balcarce 50 entienden que es la mejor manera de concluir el tema y, además, están convencidos de que le traerá dificultades presupuestarias al próximo gobierno.

Con esta batalla legislativa ganada, la oposición ya pone sus ojos en el Presupuesto 2020 que la semana próxima ingresará formalmente al Congreso. El ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, se presentará mañana en el Parlamento ante las comisiones respectivas. El último cálculo de gastos e ingresos del Estado que presentará el equipo económico del presidente Mauricio Macri establece una inflación anual del 34% para el año venidero. En cuanto al dólar, se prevé un valor  de 75 pesos para fin del próximo año que viene y un promedio de 67 pesos para todo 2020.

En los detalles que se conocieron del proyecto que ingresará el lunes figura un crecimiento aproximado del PBI bastante optimista, del 1%, en tanto que para el presente año se prevé una caída del PBI del 2,6%, que arrastrará al menos un 1% para el próximo año.

En cuanto a la inflación, como se dijo, está estimada para todo el próximo año en un 34%, mientras que para este 2019 las autoridades económicas prevén una estimación del 53% de inflación.

El consumo privado tendría una recuperación del 1,4%, en tanto que el déficit del presente año está calculado en un 0,5 por ciento.

En cuanto a la Balanza de Pagos, se estima que este año cerrará con un déficit del 0,9% del PBI, pero para 2020 se calcula un número positivo del 0,4%, en función de que la balanza comercial cerraría el año que viene con 17.500 millones de dólares, 1400 más que lo que se calcula para el presente año.

Lo cierto es que más allá de cumplir con la norma que indica que el texto de la ley de leyes debe ser enviado al Congreso a mediados de septiembre, la oposición no está dispuesta a dar el debate antes de las elecciones de octubre. Así las cosas, los números planteados por el equipo de Hernán Lacunza son más que preliminares. Si el Frente de Todos triunfa en octubre el texto seguramente será modificado de acuerdo a las previsiones que pueda aportar el futuro gobierno.

Asesores de los distintos bloques que conforman el Frente de Todos le confiaron a Tiempo que, en caso de imponerse la formula Fernández-Fernández el próximo 27 de octubre, el Presupuesto 2020 terminará siendo debatido en sesiones extraordinarias y por la nueva composición ambas cámaras. «