A través de un decreto firmado por la vicepresidenta Gabriela Michetti, quien ejerce la presidencia ante la ausencia de Mauricio Macri, el gobierno nacional recortó a la mitad las asignaciones familiares para “zonas diferenciales” que asistía a unos 100 mil chicos.

La medida comenzará a regir a partir de septiembre y recorta a 1.578 pesos el beneficio que recibían las familias de la Patagonia, así como de Formosa, Mendoza, Salta, Catamarca y Jujuy.

Por residir en ‘zonas diferenciales’, estas familias recibían por hijo el doble que en el resto del país, entre $ 3133 y 3407.

“El extra no tenía un criterio de lugares con mayores niveles de pobreza, era algo antiguo para poblar regiones y no se podía sostener”, dijo el titular de la ANSES Emilio Basavilbaso a Clarín para justificar el ajuste.

En el mismo decreto se establecen además nuevos topes máximo para cobrar asignaciones familiares: bajó de 94.786 a 83.917 el ingreso máximo del grupo familiar o el ingreso individual de 41.959 de uno de los integrantes de la familia.