Si se profundiza la crisis en Juntos por el Cambio, en los próximos días se conocerá si los negociados en la Ciudad de Buenos Aires están por encima de los ideales políticos, o si el desprecio a la nueva alianza conformada por Bullrich, Macri y Milei, también afectará la alianza en el distrito porteño. Al momento, todo indica que las principales figuras de JxC CABA quieren alejar a este terruño de la debacle nacional. Martín Lousteau, que fue contundente con sus expresiones contra el pacto Bullrich, Macri y Milei, puso cautela sobre lo que podría llegar a ocurrir en este distrito: en la Ciudad «Construimos un Juntos por el Cambio muy amplio que sacó más de 55%» de votos en las PASO pero «ahora vemos que el macrismo camina hacia Milei (…) me parece importante escuchar a Jorge Macri decir con Milei no», destacó. Pero el Jefe de Gobierno electo dijo que todavía no es momento de manifestar su postura electoral en el balotaje y afirmó: «Una cosa son las posturas individuales y otra es la responsabilidad que tenemos los que fuimos elegidos», dijo, y ante el quiebre de la alianza nacional, agregó: «No se terminó Juntos por el Cambio, no lo voy a dar por hecho».

Sin embargo, analistas y referentes políticos aseguran que en la Ciudad el quiebre de JxC tendrá sus efectos. «Me parece que hoy los dirigentes de la UCR, como del PRO, y los demás partidos que integran JxC, quienes no se pronuncian a favor del libertario, indirectamente lo están haciendo por Sergio Massa. Pero en la Ciudad de Buenos Aires, tras las declaraciones de Rodríguez Larreta, lo que se puede romper además es el PRO», analizó en diálogo con Tiempo Santiago Giorgetta de la consultora Proyección.

Para el especialista esto se opone, incluso, a lo que manifestó el propio Mauricio Macri, quien dijo que como él armó el PRO este espacio no se iba a romper; dado que Larreta es pieza fundamental de ese armado. «Me parece que ahí hay una clave, va a tener que empezar a leer un nuevo tablero de cómo se rearma la oposición, la disputa entre la Unión Ciudad Cívica Radical y el PRO va a ser más pareja. Porque esta pirueta que realizó Patricia Bullrich, que nada más y nada menos es la presidenta del PRO, es una especie de tortilla que cuando se quiso dar vuelta se rompió», destaca Giorgetta.

En la legislatura porteña hay otra batalla. La gran mayoría de las y los legisladores de JxC no se pronunciaron a favor o en contra de ningún candidato de cara al balotaje. Roberto García Moritán, que hoy integra la alianza fue uno de los pocos: «No cuenten conmigo para hacerle el juego a Massa», lanzó.

«Todo parece indicar que la acelerada desintegración de Juntos por el Cambio abre la oportunidad de un reagrupamiento de las fuerzas del amplio campo nacional popular y progresista a nivel local. Es la apertura de un período de discusión entre el peronismo, el progresismo, y el sector del radicalismo que no están dispuestos a acompañar el acuerdo de Macri con los libertarios, que puede eventualmente tener su expresión en la legislatura», señala el diputado porteño de Unión por la Patria, Manuel Socías.

Para el referente político, aún queda por ver qué hace Jorge Macri ya que «es un dirigente que tiene peso propio, parece estar alineado con su primo, pero bueno, se verá en el transcurso de las próximas semanas. Si se manifiesta alineado con su primo, ahí sí se abre la puerta de este regrupamiento con eje en el peronismo pero con protagonismo del radicalismo, y de otro bloque más identificado con el macrismo duro y los libertarios. Se abriría una dinámica novedosa en la ciudad que puede representar la posibilidad del fin del ciclo del macrismo porteño», termina.

Tras el escrutinio definitivo, desde el 10 de diciembre el parlamento porteño tendrá 30 legisladores de Juntos por el Cambio (Vamos Juntos, UCR-Evolución, Partido Socialista y Republicanos Unidos), que hoy tiene 32. Unión por la Patria tendrá 18 diputados; La Libertad Avanza nueve, y el Frente de Izquierda contará con tres diputados locales. De reagruparse las fuerzas de la UCR, JxC podría perder varios escaños.

«Lo que estamos viviendo es un circo, una coalición estallada y lo que los mantiene unidos en realidad en la legislatura son los negocios, eso no hay que perderlo de vista porque estos negociados implican un modelo de Ciudad excluyente donde, por ejemplo, el acceso al derecho a la vivienda, es imposible», dice la legisladora porteña del FIT, Alejandrina Barry.

Para la diputada de izquierda, Jorge Macri puede decir que no apoyará a uno ni a otro, pero finalmente es el primo de Macri el que orquestó todo esto. «Lo que hay que tener en cuenta es que esa división se va a expresar en la legislatura con nuevas alianzas con los libertarios, con nuevas alianzas justamente para impulsar más negociados. Ahora hay que pensar cómo también en la ciudad se organiza una fuerza que sale a enfrentar esas políticas, porque la gran discusión es, por un lado la rosca que hay por arriba que es muy ajena a los intereses populares, y por otro lado una Ciudad donde se ve una política cada vez más excluyente», agrega Barry. «