Asado de por medio, la Liga de Gobernadores peronistas volvió a reunirse este viernes en La Plata con Axel Kicillof como anfitrión. En el primer encuentro tras la asunción de Sergio Massa como ministro de Economía, los mandatarios reclamaron bajar la inflación, mejorar los ingresos de las familias argentinas y buscar un «amplio consenso» para aprobar el Presupuesto 2023 que será enviado en septiembre al Congreso Nacional. Para lograr esos objetivos, propusieron cinco «medidas concretas».

La reunión se desarrolló en la residencia del gobernador, ubicada en calle 5 entre 51 y 53, por más de tres horas y en total hermetismo. Hasta allí, llegaron Jorge Capitanich (Chaco); Gildo Insfrán (Formosa); Gustavo Melella (Tierra del Fuego); Gustavo Bordet (Entre Ríos); Sergio Ziliotto (La Pampa); Osvaldo Jaldo (Tucumán); Alberto Rodríguez Saa (San Luis); Gerardo Zamora (Santiago del Estero); Ricardo Quintela (La Rioja); Sergio Uñac (San Juan); Rubén Dusso y Eugenio Quiroga, vicegobernador de Catamarca y de Santa Cruz, respectivamente. Todos se retiraron sin hacer declaraciones. Sí hubo foto en las escalinatas de la casa oficial en una muestra más de unidad del Frente de Todos. No estuvieron ni el presidente Alberto Fernández ni Massa, quienes habían sido invitados al convite.

Tras la comida y la sobremesa, los mandatarios emitieron un comunicado en el que sentaron su postura sobre las medidas económicas tomadas por Massa en estas dos semanas y manifestaron la necesidad de «aunar esfuerzos y voluntades para reducir la inflación, sostener el crecimiento de la economía, potenciar el empleo y mejorar el ingreso de las familias argentinas».

La segmentación de tarifas para luz, agua y gas anunciada esta semana fue uno de los temas centrales en la mesa. En este punto pidieron «proteger el ingreso de las familias mediante políticas tarifarias que contemplen principios esenciales de equidad y accesibilidad» y volvieron a la carga con el reclamo que vienen sosteniendo desde que se conformaron como «Liga» para que «se resuelvan las asimetrías en materia de subsidios de transporte público», como así también «ratificar un sendero de tarifas energéticas compatibles con el mayor consumo en zonas específicas del país».

En el texto, los gobernadores propusieron cinco «medidas concretas» que consideran claves para empezar a resolver la crisis económica que atraviesa el país. En primer lugar, pidieron propiciar un «amplio consenso» para obtener la sanción del Presupuesto 2023 «con criterio federal e inclusivo» y evitando que sea «motivo de disputas sectoriales ni especulaciones electorales».

En segundo lugar reclamaron garantizar «la continuidad de los programas de obras públicas y viviendas» y, en tercero, promover el acceso de alimentos a precios accesibles a través de redes de proveedores locales y mercados populares. Además, propusieron reducir el costo de los medicamentos y redoblar los esfuerzos para transformar los planes sociales en «empleos genuinos».

En el documento, los trece mandatarios admitieron que «no es fácil gobernar en este contexto internacional complejo, pero al mismo tiempo este desafío nos debe unir más que nunca con una única bandera: la bandera argentina».

En el final, recordaron los principios que unen a los gobernadores peronistas. «Unidad Nacional, Federalismo real y Desarrollo Económico con justicia social son los principios que nos unen. Necesitamos que estos principios se traduzcan en acciones para construir nuevos tiempos que nos permitan unir sueños de generaciones en realidades tangibles», cerraron.

El encuentro de este viernes fue el tercero desde que se conformó la Liga. El primero fue el 24 de junio en Chaco y el segundo en el Consejo Federal de Inversiones (CFI) el 27 de julio. En esa oportunidad, se reunieron también con el Presidente y le pidieron dar un volantazo en la política económica. Un día después, Massa fue anunciado como el reemplazante de Silvina Batakis en el sillón de Economía.