«Si no lo hizo un hombre, que lo haga una mujer», dijo recientemente María de Jesús Tlatempa, madre de uno de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, desaparecidos hace diez años, el 26 de septiembre de 2014, en uno de los episodios más emblemáticos de la impunidad en México.
En pocos días, Andrés Manuel López Obrador dejará su cargo como presidente y pese a las promesas y a algunas acciones concretas de búsqueda y la publicación de documentos de inteligencia, se retira sin lograr el esclarecimiento total del caso.
Los familiares de las víctimas, que marchaban desde la semana pasada para concluir este jueves en la Ciudad de México, confían en que la próxima Administración de Claudia Sheinbaum logre dar con el paradero de sus hijos y continúe lo establecido en el decreto de AMLO de 2021 por el que se creó la «Comisión para el Acceso a la Verdad».
En julio pasado, la presidenta electa recibió a los familiares, ante quienes comprometió a dar seguimiento en la búsqueda de la verdad y la justicia del caso. “Vamos a seguir trabajando con ellos, vamos a encontrar un método de trabajo que nos permita lo que están pidiendo ellos, que es verdad, justicia y dónde están los jóvenes”, dijo entonces Sheinbaum tras el encuentro.
«Esperemos que se comprometa y que cumpla con el decreto presidencial que firmó López Obrador para esclarecer el caso Ayotzinapa», insistió María de Jesús, madre de José Eduardo Bartolo Tlatempa, quien tenía 19 años cuando desapareció junto a otros 42 compañeros en la ciudad de Iguala, Guerrero, después de haber sido detenidos por policías municipales.
En las últimas reuniones que sostuvieron con López Obrador y la Fiscalía General de la República (FGR), los padres exigieron que el Gobierno les entregara una serie de documentos del Ejército que ellos creen que pueden incluir información clave sobre el paradero de sus hijos.
Aunque los padres creen que faltan documentos clave, el propio López Obrador ha dicho que tanto el Gobierno como los militares entregaron todo a las familias, a sus abogados y al equipo de expertos independientes que investigaron el caso durante años. El presidente también dijo que mantiene su compromiso y que el expediente seguirá abierto.
De acuerdo con el Gobierno, entre septiembre de 2023 a junio de 2024, se realizaron 50 acciones de búsqueda en campo, en nueve municipios de Guerrero. Como resultado de esas acciones, se realizó el hallazgo de 10 osamentas y restos óseos que permitieron la identificación de dos estudiantes desaparecidos.
Según información oficial, al junio de 2024, se encontraban detenidas 118 personas, de las cuales 35 son integrantes de la organización criminal Guerreros Unidos, 79 son policías de distintas corporaciones y cuatro exfuncionarios públicos.
Los estudiantes de Ayotzinapa, en su mayoría de origen humilde, habían viajado a Iguala para tomar autobuses y asistir a una manifestación en Ciudad de México, pero, durante la noche, fueron atacados por la Policía local. En esos hechos, seis jóvenes perdieron la vida y 43 desaparecieron.
BB con Sputnik