Mientras el senador Andrónico Rodríguez fue habilitado por Tribunal Constitucional para ser candidato en las presidenciales bolivianas del próximo 17 de agosto, otro fallo paralelo le cerró el camino a Evo Morales. Pero no sólo ese traspié sufrió el expresidente: el gobierno de Luis Arce (también surgido del Movimiento al Socialismo; quien fuera su ministro de Economía), presentó una denuncia penal contra él, acusándolo de un total de ocho delitos, entre ellos “terrorismo y de obstaculización de los procesos electorales”, en función del clima de tensión a las protestas y cortes de ruta de los seguidores de Morales, quienes pugnaba por el derecho a ser candidato presidencial.

La crisis y los enfrentamientos profundos en la izquierda boliviana parecen irreversible y pueden dar pie a la derecha a ganar en las urnas.

En ese contexto fue habilitado Andrónico Rodríguez, quien como reflejo de esa crisis había roto vínculos políticos tanto con su mentor político, Evo Morales, como con el actual presidente Luis Arce.

Los otros candidatos habilitados de la izquierda son el exministro de Gobierno, Eduardo del Castillo (MAS, reemplaza a Arce, quien declinó ir por la reelección) y la alcaldesa de la ciudad de El Alto, Eva Copa Murga (Morena). La derecha tampoco va unida: el empresario Samuel Doria Medina (Unidad); el expresidente Jorge Quiroga (Libre) y el alcalde de la ciudad de Cochabamba, Manfred Reyes Villa (Autonomía Para Bolivia).

Las encuestas existentes, que son previas a la habilitación de Rodríguez, lo ubican tercero (14,2%) tras Doria Medina (19,1%), seguido por Quiroga (18,4%) y sobre Reyes Villa (7,9%). «