La provincia de Santa Fe entregó una de las remontadas más importantes para Cambiemos. La apretada victoria en las PASO de la lista kirchnerista encabezada por Agustín Rossi, que había superado al candidato de la alianza entre radicales y macristas, Albor Cantard, por apenas 16 mil votos, fue ampliamente revertida, tal cual se pronosticaba, en función de la dispersión de los votos de los precandidatos que perdieron con Rossi en agosto.

En efecto, escrutadas más del 95% de los votos santafesinos, la lista de diputados de Cambiemos suma el 38,05% de las voluntades; y el Frente Justicialista reúne el 25,55%. La crisis interna del socialismo lo deja en un cómodo tercer lugar: el Frente Progresista Cívico y Social suma apenas un 14,41% de los votos en la única provincia que gobierna.

Una de las claves de la remontada fue el aumento de la participación, que pasó del 70% en las PASO a más del 75% hoy. Cambiemos, que no había llegado a los 500 mil votos totales en agosto, está superando los 700 mil, cuando todavía falta escrutar más de 300 mesas.