«A veces, necesitás un poco de mala suerte, para construir el carácter que te llevará al éxito«. La frase pertenece a la leyenda austríaca de la Fórmula 1 Niki Lauda y fue tomada por la agencia de promoción de deportistas Bullet Sports Management (BSM), que representa a Franco Colapinto, para despejar los rumores que intentan desestabilizar al rookie argentino.
A través de un posteo en redes, BSM lanzó un mensaje dirigido a los fanáticos: «Ignoren los rumores sin fundamento. Ignoren a los detractores. Los altibajos son parte del automovilismo, y cuando rindes al máximo nivel, cada momento se amplifica ante la mirada de millones (…) ¡Vamos, nene! ¡Nosotros te cubrimos!».
La empresaria española María Catarineu es una de las fundadoras de BSM, junto al expiloto escocés Jamie Campbell-Walter. La llegada de Colapinto a la F1 es el primer gran éxito de BSM y, de hecho, el apoyo a Colapinto fue la piedra fundacional de la marca.
Luego del Gran Premio (GP) de Silverstone, donde Franco siquiera pudo arrancar el auto, trascendió que Catarineu puso el grito en el cielo en el box de Alpine y que incluso mantuvo una discusión con el hombre fuerte de la marca, Flavio Briatore. Sin embargo, todo fue desmentido y no hay evidencia alguna de que algo así haya ocurrido.
Colapinto y un auto que no anda
Más allá del apoyo incondicional de BSM, Colapinto vive momentos complicados en la F1. El pase a Alpine suponía un salto de calidad y terminó por significar lo contrario. Al cabo de media temporada, es el equipo con peor performance de la grilla.
Lejos de pelear por el Puesto 5 (P5) o P6 –tal como viene haciendo en los últimos años–, la escudería francesa marcha última, por detrás incluso de escuderías como Sauber o Haas. No sólo el australiano Jack Doohan cayó en desgracia, sino que el piloto principal, el francés Pierre Gasly, tampoco puede sacarle jugo al auto.
«El año pasado, el rendimiento general en comparación con los demás era mucho mejor. El monoplaza estaba en un lugar más competitivo, y estar en el podio en Brasil fue increíble. Pero este año estamos peor. Los demás tienen un mejor paquete«, criticó Gasly después del último GP disputado hasta el momento.
Colapinto no escapa a esta situación y no ha logrado puntos en los 6 GP que disputó. En medio de la tormenta, suenan nombres a su alrededor como posibles reemplazos. Ocurre que el piloto debutante es siempre el fusible que salta primero, lo que ya quedó demostrado con Doohan, quien ocupó la butaca de Franco en los primeros 6 GP, con resultados muy pobres.
Colapinto y el fantasma de Valtteri Bottas
Así las cosas, sobrevuelan en Alpine nombres como los del novato estonio Paul Aron o del experimentado finés Valtteri Bottas, dos veces subcampeón del mundo con Mercedes, que hoy es piloto de pruebas de la escudería alemana.
Son de público conocimiento las conversaciones entre Briatore y Toto Wolff, su par de Mercedes. El punto de unión es que a partir del año que viene Alpine tendrá motores Mercedes y se espera un salto de calidad en el rendimiento. Ante un panorama complejo, Briatore buscó unir aún más a los equipos y, en palabras de Wolff, se mostró insistente con la posibilidad de contar con Bottas. Por el momento, no hay más que eso.
Más allá de las intenciones de Briatore y Wolff, Bottas no tiene muchas razones para mudarse a otra escudería. Mucho menos, a una con un rendimiento tan bajo como Alpine. En criollo, Bottas es suplente en un equipo grande, que a su vez vive momentos de incertidumbre con respecto a sus pilotos.
El británico George Russell tiene la Espada de Damocles sobre la cabeza, a partir de los rumores sobre la posible llegada del tetracampeón holandés Max Verstappen. El rookie Kimi Antonelli, de apenas 17 años, todavía está verde y sus resultados son errantes. Para Bottas, que puede aportar esa certidumbre al equipo, suena mejor quedarse a la expectativa, mientras trabaja en el desarrollo del auto del año que viene.
Los resultados de Colapinto
De la media temporada ya disputada (12 GP), Franco disputó la mitad (6 GP). Fue P16 en su debut en Imola; P13 en Mónaco; P15 en España; P13 en Canadá; P15 en Austria, y DNS en Silverstone.
No sumó puntos y tuvo algunos accidentes en las clasificaciones. Pero cumplió. Logró mejores números que Doohan y está 2-4 en el «mano a mano» con su compañero Gasly. El presente es difícil, pero no es desolador.
Cualquiera puede ser eyectado de la Fórmula 1. Quedó demostrado en la abrupta salida de Christian Horner de Red Bull, tras 20 años como director deportivo de uno de los equipos más exitosos. Nadie tiene el lugar asegurado; mucho menos, un piloto rookie.
El propio Briatore no tiene tan seguro su lugar, tras la salida de Alpine del CEO que lo trajo: Luca de Meo. Se habla de inversores chinos que estarían interesados en comprar el equipo. Se habla, incluso, de que el propio Horner podría comprar Alpine. En la F1, el «run-run» siempre está y no únicamente en la pista.
Para Franco, sólo queda correr. El piloto argentino sabe que buena parte de su suerte está ligada a su rendimiento, que no es malo en la actualidad, pero tampoco deslumbra como lo hizo en Williams el año pasado.
Si bien el presente de Alpine está lleno de incertidumbre, los motores Mercedes del año que viene ofician de luz al final del túnel. Por delante, quedan 12 GP; media temporada para demostrar; para convencer a Alpine o a cualquier otro equipo, en una grilla que se mueve de manera permanente y que tiene muchos signos de interrogación en escuderías importantes. «