Axel Kicillof arrancará el 2024 con ley fiscal impositiva, autorización para tomar deuda por 1800 millones de dólares y la extensión de la emergencia administrativa por un año más. Después de días de negociación, el oficialismo llegó este jueves a un acuerdo los bloques del PRO y la UCR y logró los votos para dar luz verde a las iniciativas que el gobernador había enviado hace menos de una semana. Hubo concesiones del Ejecutivo, como la baja de los topes de incremento en el impuesto Inmobiliario y un fondo para municipios por 116 mil millones de pesos.

El paquete fue aprobado en paralelo en el Senado y en Diputados, que terminó de sesionar por la madrugada. La primera ley contempla la prórroga de las emergencias en materia de seguridad pública, política y salud penitenciaria, infraestructura, hábitat, vivienda y servicios públicos, administrativa y tecnológica por un año y no dos, como pretendía Kicillof, y con la expresa prohibición de crear cargos políticos durante ese período, otro ítem que pidieron los legisladores de la oposición.

La norma contempla el permiso para tomar crédito por hasta 1800 millones de dólares a lo largo de 2024. Este punto es clave para la gestión de Kicillof ya que tiene por objetivo atender los vencimientos de la deuda pública programados para el año que viene.

La segunda ley que se aprobó es la fiscal impositiva que fija los valores de los impuestos provinciales que regirán a partir de enero. Como parte de la negociación con la oposición se dispuso una baja de los topes para la actualización y el impuesto Inmobiliario subirá hasta 200% para las propiedades de mayor valuación y no 300%, como estaba previsto en el proyecto original. En el caso del impuesto Automotor -Patente- el incremento promedio será del 145% y el tope máximo del 170% para los autos de alta gama.

El punto que logró destrabar la negociación, no obstante, fue la inclusión del Fondo de Fortalecimiento Fiscal Municipal por 116 mil millones de pesos para los 135 distritos que se distribuirá por el Código Único de Distribución (CUD). Además se reprogramaron los vencimientos de la devolución de los 8800 millones de pesos que adeudan los municipios a la Provincia por dos fondos: uno creado en la pandemia para ayudar a pagar salarios y otro de este año por el bono de 60 mil pesos.

A diferencia de años anteriores, las dos leyes sancionadas no estuvieron acompañadas por una ley de Presupuesto, ya que Kicillof resolvió prorrogar la ley de leyes actual frente a la incertidumbre y la falta de variables macroeconómicas nacionales.

Como parte de la negociación con la oposición se resolvió, además, dejar para el año que viene el debate sobre la creación del Laboratorio Estatal de Medicamentos y de la Empresa Bonaerense de Emergencias. Ambas iniciativas fueron giradas a comisión.

ARGUMENTOS, CACEROLAS Y LIBERFACHOS

Con el acuerdo político ya cerrado, las dos cámaras sesionaron casi en simultáneo. El debate arrancó pasadas las 22.30 en la cámara baja, que aprobó el pedido de endeudamiento y lo giró al Senado. La Cámara alta, por su parte, lo convirtió en ley y le dio media sanción al proyecto fiscal impositivo que terminó convirtiéndose en ley en la Cámara de Diputados ya pasada la medianoche.

Para sancionar ambas normas, el oficialismo logró acuerdos con los bloques PRO y UCR + Cambio Federal, con cuyos votos logró llegar a la mayoría especial. No acompañaron ninguno de los cuatro bloques libertarios, ni el Frente de Izquierda como tampoco los radicales del Acuerdo Cívico – GEN. En el Senado sí hubo apoyo parcial del bloque La Libertad Avanza.

En Diputados, el legislador oficialista Juan Pablo De Jesús, defendió las iniciativas del Ejecutivo y detalló las modificaciones ingresadas por acuerdo con la oposición. «Esperamos poder darle esta herramienta al gobernador para que siga garantizando lo derechos de los y las bonaerenses», señaló.

La legisladora Silvina Vaccarezza argumentó en nombre del bloque UCR + Cambio Federal el voto a favor de las iniciativas. Cuestionó la prórroga de las emergencias, aunque admitió que, desde el gobierno de Carlos Ruckauf hasta ahora, la Provincia siempre «estuvo en emergencia» y también advirtió que el endeudamiento total es «muy superior» a los 1800 millones si se suman los 300 millones de dólares en Letras de Tesorería y la reasignación de créditos pendientes y que redondea los 2900 millones. Pese a esto, aclaró: «Somos una oposición constructiva que señala en alto los abusos, marca una diferencia, hace un control, pero que también entiende que el diálogo y los consensos son las herramientas para aprobar las leyes que sean indispensables para el gobierno».

El presidente del bloque La Libertad Avanza, Nahuel Sotelo, justificó la negativa con cacerola en mano. «Se está votando un verdadero impuestazo con poca información, se está pidiendo un endeudamiento de 1800 millones cuando ni siquiera han informado el tercer trimestre de los gastos que ha tenido la Provincia y sin siquiera hacer una baja del gasto público», señaló y criticó a sus pares del oficialismo que salieron a fomentar los cacerolazos contra el gobierno de Javier Milei. «Y acá piden una emergencia por la herencia que recibe Kicillof de Kicillof», agregó mientras hacía sonar la cacerola.

Los radicales díscolos, que quedaron al margen de la negociación, también justificaron su voto en contra. «No sabemos qué estamos votando», señaló Claudio Frangul, titular del bloque Acuerdo Cívico UCR GEN, y se quejó por la falta de información y solicitó la votación nominal de la ley impositiva.

Los dos legisladores del Frente de Izquierda, Laura Cano y Guillermo Kane, también se opusieron por considerar que Kicillof debe desconocer la deuda contraída por María Eugenia Vidal y que debe gravar más a los sectores que más tienen con los impuestos. «Nos quieren hacer creer que la única salida es ajustar a los trabajadores», dijo Cano, quien además se despachó contra el diputado Sotelo por la cacerola y apodó «liberfacho» al legislador Juan Esper (ex Juntos), quien anunció su pase al bloque de LLA en plena sesión.

RECLAMO POR LA COPARTICIPACIÓN

El Senado fue más expeditivo. Aprobó la ley impositiva y luego el endeudamiento con los votos de Unión por la Patria, el PRO y UCR + Cambio Federal, y del bloque Libertad Avanza que votó en general y rechazó cinco artículos del proyecto tributario.

Por el oficialismo, el senador Marcelo Feliú presentó los proyectos y puso en valor los consensos alcanzados. «Hubo un gran trabajo de este honorable cuerpo para buscar acuerdos. El gobernador entiende el valor republicano y que es en la búsqueda de consensos donde se efectiviza», remarcó.

El titular de la bancada del PRO, Alejandro Rabinovich, habló de la «voluntad» que puso la oposición para aprobar las leyes y agradeció que el Ejecutivo haya cedido en los topes impositivos a las categorías más altas. Pero pidió «más responsabilidad» cuando se debaten cuestiones impositivas y recordó que había advertido, en su momento, sobre el impacto que iba a tener la quita del impuesto a las Ganancias en los recursos coparticipables.

El presidente del bloque de senadores de la UCR, Agustín Máspoli, también valoró las modificaciones en la ley impositiva. «Otorgamos una herramienta necesaria al gobernador y logramos que se reconozca la difícil situación que atraviesan los vecinos», dijo y agregó: «La gente tiene problemas reales que requieren soluciones reales. El Estado debe acompañar y salir de la gestión del parche. El gran desafío del gobernador es salir de lo urgente y avanzar en lo importante».

El legislador Marcelo Daletto, de UCR + Cambio Federal, puso el foco en la discriminación que sufre la provincia en materia de coparticipación. «La Provincia para lograr el equilibrio que necesita debe reconocer el problema de corto plazo que tiene con las transferencias nacionales y tiene que reconocer que ésta es la única provincia discriminada en todo el país, porque aporta el 37% de los impuestos y solo recibe el 21%, le faltan 16 puntos faltando, si tuviera esos fondos no tendría ningún problema», dijo y pidió dar el debate con Kicillof a cabeza: «Esta provincia necesita recuperar algunos de esos puntos de la mano del gobernador y que los 70 de los diputados nacionales que tiene».