El Encuentro Memoria, Verdad y Justicia (EMVyJ) realizó este martes 9 una conferencia de prensa en la que dio detalles de la movilización del próximo jueves 11, en la que reclamará la cárcel común para el ex comisario de la policía bonaerense Miguel Etchecolatz, y la libertad inmediata y cierre de las causas que pesan sobre los siete detenidos en las marchas contra la reforma previsional del 14 y 18 de diciembre. La movilización partirá del Congreso a las 17 y culminará en la Plaza de Mayo, donde se leerá un documento.
EMVyJ considera que existe una escalada represiva del gobierno a partir de la desaparición forzada seguida de muerte de Santiago Maldonado y del asesinato de Rafael Nahuel, ambos a manos de fuerzas de seguridad del Estado que comanda la ministra Patricia Bullrich.
Señaló, en ese mismo sentido, la persecución de quienes participaron de las marchas por Maldonado; la represión del 12 de diciembre a la marcha contra la conferencia ministerial de la Organización Mundial de Comercio; también la del 13 del mes pasado contra la manifestación de movimientos sociales y la represión contra cientos de miles de manifestantes ( ) y feroz persecución y cacería durante la retirada de las columnas en las jornadas del 14 y el 18 contra la reforma previsional.
Además, EMVyJ apuntó contra las represiones de Gildo Insfrán a la comunidad Wichi de Formosa, las de Alicia Kirchner contra los estatales santacruceños y las de Gerardo Morales contra los obreros del Ingenio La Esperanza en Jujuy.
Horas antes de la conferencia de prensa se produjo el apresamiento del militante del Partido Obrero Dimas Ponce, quien se suma a la prisión de César Arakaki, también del PO, ambos por su participación en la movilización del 18 de diciembre, y de Rossano, Parodi, Giusto, Giancarelli y Valotta, todos ellos por haber participado en la jornada del 14 de ese mes. También rechazó la orden de detención de Sebastián Romero.
Según EMVyJ, se trata de nuevos presos políticos de Macri y de su justicia cómplice, que violan el derecho a manifestar y reclamar a fin de imponer brutales medidas de ajuste. También denunció un avance contra la libertad de expresión, dada la inédita uniformidad y concentración de medios de comunicación que actúan como voceros de las políticas oficiales.
