Ayer viernes se desencadenó un escape de gas en el Colegio Corazón de María, ubicado en el barrio porteño de Palermo por lo que, de acuerdo a fuentes de Bomberos de la Ciudad, 22 menores fueron asistidos. En ese contexto, cuatro de los menores fueron trasladados por el SAME al Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez y a la Clínica Bazterrica, en medio de cuadros de intoxicación.

Dos de los estudiantes del establecimiento privado ubicado en Guise al 1900, comenzaron a sentir mareos y náuseas y fueron asistidos en la vía pública, mientras que personal del establecimiento comentó que percibió olor a gas desde una estufa. Por eso solicitaron la presencia de operarios de la empresa Metrogas, que determinó la evacuación del edificio.

Por su parte el titular del SAME, Alberto Crescenti, detalló a la señal TN: “En una recorrida que estábamos haciendo con nuestro móvil, en la base que hemos instalado en Juan B. Justo, piden un auxilio desde este colegio. Justamente a la médica que estaba de guardia en una de las ambulancias de la base, el hijo le refería que estaba sintiendo un olor, que tenía cefalea, mareos. También empezaron a recibir otros llamados de la central 107”.

Crescenti puntualizó que activaron el protocolo junto a Bomberos y policía de la Ciudad, pero señalo que, al llegar, encontró un solo médico con más de 20 alumnos que precisaban asistencia. “Un solo médico con 25 pacientes no es el protocolo que se debe emplear” remarco.

Crescenti también comento que tenía en sus manos el informe de Metrogas. “El informe de Metrogas, que lo tengo ahora, (dice que) es una fuga del circuito de la cañería, de los artefactos, que no estaban en condiciones”.

La empresa Metrogas, por su parte, informó que encontró “una pérdida en los circuitos de la cañería y que los artefactos no están en condiciones para su funcionamiento”. A raíz de esto, Metrogas decidió el «corte del suministro gaseoso”.

Antecedentes porteños

En los últimos años los hechos de escapes de gas con niños involucrados están en crecimiento. A fines de abril hubo al menos 18 chicos intoxicados en el Hospital Gutiérrez: denunciaron falta de mantenimiento y buscaron citar a Quirós a la Legislatura, aunque el ministro de Salud terminó sin ir.

Fue una fuga de monóxido de carbono en la Unidad 4 del centro de salud porteño que generó la evacuación de medio centenar de médicos, familiares y pacientes.

En noviembre del año pasado una obra de la Ciudad provocó escapes de gas en una escuela de Villa Luro y los padres pidieron que se suspendieran las clases.

En el edificio de la calle Yerbal 4965 de Villa Luro funcionan dos establecimientos educativos: el Jardín de Infantes Nucleado D y la Escuela Primaria N° 8 del distrito escolar 18. En la puerta de entrada al edificio, el gobierno porteño realizó una obra que trajo mucha preocupación a las familias de la comunidad educativa.

Además de complicar las entradas y salidas, los martillos eléctricos provocaron en dos ocasiones fugas de gas y las familias tuvieron que retirar a los chicos. Luego, agentes de bomberos de la Ciudad, decidieron cortar el suministro de gas en toda la manzana. “Esto es un peligro para nuestros hijos”, aseguraron en ese entonces las familias.