El combo que conforman el ajuste fiscal, la megadevaluación y los tarifazos con que arrancó el gobierno de Javier Milei ya está produciendo efectos sensibles en el nivel de actividad económica. Uno de los datos que así lo reflejan es el Indice General de Actividad (IGA) que elabora la consultora OJF, dirigida por Orlando Ferreres.

Según el informe publicado este miércoles, en enero el índice mostró una caída de 3,8% con relación al mismo mes del año anterior. Además, en la medición desestacionalizada, la comparación con diciembre también arrojó una merma de 0,8% en la actividad.

Para la elaboración de ese indicador se utiliza la información que proporcionan 122 series estadísticas, lo que le otorga una gran representación del conjunto de la economía que, combinada a la rapidez de su procesamiento (mensual en vez de trimestral), lo convierte en un “proxy” de la evolución del PBI.

El análisis de cada sector detalla bajas muy grandes en sectores relevantes como construcción (bajó 7,6%), industrias manufactureras (4,2%) y comercio (3,3%). El número final pudo haber sido mucho peor si no hubiese sido por la agricultura y ganadería, que mostró una mejoría de 17,5% en comparación con el dato de enero de 2023, ensombrecido por la sequía. En líneas generales, la actividad quedó en los mismos niveles de comienzos de 2021 y perdió toda la recuperación post-pandemia.

“Con la excepción de la agricultura y el segmento de minas y canteras, el resto de los sectores relevantes están mostrando caídas interanuales muy considerables, y las perspectivas de corto plazo no son muy alentadoras”, señala el informe de OJF.

“El plan de gobierno, en un entorno de escasez de divisas, tendrá efectos recesivos en los primeros meses de 2024, y los números recién mejorarán cuando llegue la cosecha gruesa. De esta manera, una mejora más sustancial sólo sucederá si la inflación se reduce y se eliminan los controles cambiarios”, agrega el documento.

La caída detectada por el índice de actividad de OJF tiene correlación con otros datos que van surgiendo para pintar un panorama de los primeros meses del gobierno de Javier Milei. El Indice de Producción Industrial (IPI) de la misma consultora bajó 4,2% interanual en enero. Con algún retraso, el Indec también midió que en diciembre hubo una fuerte caída en la actividad fabril: las industrias utilizaron sólo el 54,9% de su capacidad productiva instalada, casi nueve puntos menos que un año antes (63,8%). De la misma manera, el EMAE (Estimador Mensual de la Actividad Económica) que elabora el organismo estadístico bajó 4,5% interanual en diciembre.

Las perspectivas para el corto plazo no son buenas y algunas grandes empresas ya van poniendo en marcha planes de contingencia. El grupo siderúrgico Acindar informó este miércoles en un comunicado que paralizará su actividad por cuatro semanas a partir del 18 de marzo ante caídas en las ventas de “entre un 35 y un 40 por ciento” y que aprovechará ese lapso para adelantar tareas programadas de mantenimiento y realizar capacitaciones de seguridad a su personal. “La caída es muy superior a lo que proyectamos”, admitieron voceros del grupo.