Tras el ataque de Estados Unidos contra sus instalaciones nucleares iraníes, la nación persa lanzó al menos unos 30 misiles contra el centro y el norte de Israel. Se trató de la primera respuesta de la república islámica y provocó un centenar de víctimas heridas, algunas de ellas de consideración.
El servicio de Ambulancias de Israel confirmó que uno de los heridos más graves es un hombre de 30 años que ha recibido el impacto de metralla. Al menos otros 77 heridos fueron hospitalizados.
Los ataques, que alcanzaron zonas de Tel Aviv, Nes Tziona y Haifa. Irán ha confirmado poco después el ataque, que describió como «la vigésima oleada de la Operación Promesa Verdadera 3», como ha denominado Teherán a su campaña de represalia contra Israel tras el comienzo hace nueve días de los ataques israelíes contra su territorio, «a través de una combinación de misiles de combustible líquido y sólido de largo alcance con una ojiva de gran potencia».
Por otro lado, el ministro de Exteriores de Irán, Abbas Araqchi, ha acusado al presidente de EEUU, Donald Trump, de haber traicionado su confianza al colaborar con Israel en los ataques a sus instalaciones nucleares en pleno proceso de negociación, y ha recordado a la Unión Europea y Reino Unido que ya participaba en un diálogo internacional antes que sus dos contrincantes decidieran «reventar la diplomacia» con el comienzo de sus bombardeos.
Aseguró: «La semana pasada estábamos negociando con Estados Unidos cuando Israel decidió reventar esa diplomacia. La semana pasada estábamos dialogando con la Unión Europea y el E3 (Reino Unido, Alemania y Francia) cuando Estados Unidos decidió reventar esa diplomacia. ¿Qué conclusiones extraen ustedes de esto?»
Irán y Estados Unidos habían mantenido hasta ahora una serie de conversaciones indirectas mediadas por Omán para resolver la situación de su programa nuclear y que el presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha hablado al menos dos veces con su homólogo iraní, Masud Pezeshkian, para negociar un retorno a las conversaciones con los países europeos que participaron en el ya difunto acuerdo nuclear de 2015.
Europapress