Asombra encontrar personas de todas las edades que comentan la serie El Eternauta sin saber demasiado de su origen ni de las circunstancias en que fue creada la historieta en que se basa , aunque parece tan presente. Este domingo el nieto de Oesterheld, declaró: ««El Eternauta no habría existido si no hubieran bombardeado la Plaza de Mayo en el ’55» ( entrevista en Tiempo Argentino). La actualidad de la serie quizás muestra una linea histórica de continuidad, incluyendo también la destrucción de la familia Oesterheld por los miembros en las sombras del Terror de Estado, con un poder también más inivisibilizado por detrás, como en la historieta que quizás su autor no soñó tan brutalmente premonitoria.

En esta placa de mármol (rescatada) de la inauguración del Hospital Militar de Bahía Blanca, figuran los nombres de quienes estvuieron en la ceremonia, señalo algunos:
– El entonces presidente Juan Domingo Perón,
– El Director General de Ingenieros, General Juan José Valle.
– El Director General de Sanidad General Pedro Eigenio Aramburu
Uno puede imaginar a los dos últimos juntos y saludandose en ese acto que la placa nos recuerda fue en 1955 ( en la placa : MCMLV).
¿Imaginaría Valle al saludar a Aramburu su no tan lejana muerte? ¿Quién podría prever que ese fusilamiento público se acompñaría de otro de civiles que sería puesto en debate por Rodolfo Walsh, también asesinado por una dictadura? ¿Imaginaría Aramburu al saludarlo la deriva de violencia desencadenada por el próximo golpe, que terminaría con su vida? ¿Imaginaría Perón algo sobre lo que sería su siguiente presdiencia al final de su vida?
La Placa tiene un título: «El Ejército materializa en esta obra su inquebrantable fe en la doctrina de la nueva Argentina»
Aramburu acompañó la colocación de la placa. La inauguración se realizó el 6 de mayo de 1955, cuarenta días antes del bombardeo a Plaza de Mayo del 16 de junio de ese mismo año. La placa fue enterrada luego del último golpe y recuperada durante ya este siglo.