El fallo de la jueza estadounidense Loretta Preska, que insta al gobierno nacional a ceder el 51% de las acciones de YPF al fondo buitre Burford Capital, sembró dudas en torno al plan de inversiones de la petrolera de mayoría estatal.

El Plan 4×4 concentra la planificación estratégica de la gestión libertaria. El objetivo es transformar a YPF en una compañía “shale de clase mundial” y posicionar a la Argentina como una gran exportadora de hidrocarburos para el año 2030.

Esto implica reorganizar la cartera de inversiones de las formaciones convencionales de gas y petróleo hacia las no convencionales ubicadas en Vaca Muerta. En este marco, el Plan Andes plantea desprenderse de 55 campos maduros de explotación convencional para que la petrolera estatal concentre su inversión en el fracking.

Empresas como Bentia -propiedad del exfuncionario macrista Javier Iguacel-, Petroleros Sudamericanos, Pecom -compañía energética de Pérez Companc-, Quintana Energy, TSB y Petroquímica Comodoro Rivadavia son algunas de las que compraron estos bloques de explotación en Mendoza, Neuquén, Río Negro y Chubut. En cuanto a los campos maduros ubicados en Santa Cruz, YPF llegó a un acuerdo con la provincia y cedió los mismos a la estatal FoMiCruz, que ya anunció que abrirá un proceso de licitación. Situación similar se espera lograr con Tierra del Fuego.

En palabras de Horacio Marín, CEO de YPF, “para 2026 la empresa será 100% no convencional”. Este proceso implica modificar el 25% de las inversiones de la compañía y abre algunos interrogantes en cuanto a las consecuencias sociales que estos traspasos pueden tener.

Barcos cargados de gas

Uno de los objetivos centrales de YPF está puesto en el Proyecto Argentina LNG, adherido al Régimen de Incentivo de Grandes Inversiones (RIGI), que busca procesar y exportar gas natural licuado (GNL). Existen tres iniciativas vinculados a esta línea de trabajo.

El más avanzado es el de la sociedad Southern Energy, integrada por Pan American Energy (PAE) e YPF como segunda accionista, que trabaja para instalar dos buques de licuefacción de gas con destino de exportación. Estas embarcaciones se ubicarán en el Golfo San Matías, en las costas de Río Negro.

El primer buque ya está en funcionamiento, pero para aumentar la exportación se planea construir un gasoducto que permita traer el gas desde Vaca Muerta. La inversión global planteada es de U$S 7000 millones en 20 años.

Los otros dos proyectos están en una etapa más inicial. YPF firmó un memorándum de entendimiento con Shell para traer dos barcos regasificadores más, con el objetivo de exportar a partir de 2029.

La tercera iniciativa corresponde a la alianza con la italiana ENI, con la cual también se acordó construir y transportar otros dos buques licuefactores.

En abril de este año trascendió que YPF descartó la construcción de una planta licuefactora en Sierra Grande, Río Negro, y que decidió centrar toda su estrategia en los buques. La instalación de esta planta, originalmente planteada en Bahía Blanca, había sido un punto de fuerte controversia.

Petróleo para el mundo

Oleoducto Vaca Muerta Sur es una megaobra de infraestructura que transportará petróleo de Vaca Muerta a la localidad costera de Punta Colorada, en Río Negro. El objetivo vuelve a ser la exportación.

Este proyecto también ingresó al RIGI y es encarado desde una sociedad llamada VMOS, integrada por YPF, PAE, Vista, Pluspetrol, Pampa Energía, Chevron, Shell, Gas y Petróleo de Neuquén (GyP) y Tecpetrol.

Hasta el momento, esta obra avanzó por la inversión de las empresas que la impulsan. Se calcula que se requieren US$ 3000 millones para completarla. El proyecto venía trabajando en un préstamo a ser otorgado por un conjunto de bancos como el Citi, Deustsche Bank, Itaú, JP Morgan y Santander por US$ 2000 millones. La firma de este financiamiento estaba pautada para el 7 de julio. Resta saber si los prestamistas mantendrán las condiciones del crédito.

Este emprendimiento es clave para ampliar la capacidad de evacuación y exportación de crudo y representa la mayor obra de infraestructura hidrocarburífera en ejecución en el país.

La principal duda es si el fallo de Preska impactará en la imagen de YPF encareciendo el acceso al crédito. El desprendimiento de las explotaciones convencionales aún no genera ingresos suficientes y, en algunos casos, representa pasivos ambientales, como sucede con el traspaso a Santa Cruz. Otra inquietud es si la empresa logrará mantener las sociedades en curso y ampliarlas. En un escenario donde YPF busca reconvertirse para competir globalmente, el acceso al financiamiento externo es tan estratégico como Vaca Muerta misma.

Renovables

YPF impulsa energías renovables con proyectos como el Parque Solar El Quemado, el primero en sumarse al RIGI, que busca remplazar combustibles fósiles en hogares. Otro gran hito es avanzar con el gasoducto Perito Moreno (ex Néstor Kirchner), clave para garantizar el suministro interno de gas.