El viernes pasado, Tiempo se hizo eco de una denuncia de vecinos, vecinas y especialistas que aseguraban que el Gobierno porteño iba a realizar una «deforestación urbana» de decenas de árboles dentro del Parque de los Patricios. En pocos días, habían sido mutiladas especies históricas que en algunos casos superan los 100 años. Tras varios días de la consulta de Tiempo, desde el GCBA reconocieron a este medio la tala de 45 árboles pero aseguraron que «se comprobó que una parte de los ejemplares se encuentran afectados por un hongo que afecta la madera y ocasiona una infección irreversible».

A raíz de varias irregularidades que se produjeron sobre este hecho, los especialistas que denunciaron la tala indiscriminada pedirán realizar un estudio independiente sobre los árboles que fueron talados y los que aún siguen en pie, para certificar si el hongo infectó a las especies como asegura el ministerio de Espacio Público y si es necesaria la mutilación de los árboles.

“Hay dos cuestiones que queremos que queden claras: Una es el procedimiento, cómo llevaron adelante todo este tema. Y la segunda cuestión es cómo sigue esto, porque no termina acá. Primero, el procedimiento es ilegal porque no cumple con el artículo 15 de la Ley 3263  de Arbolado Público Urbano y además tampoco cumple con la sentencia del Juzgado del juez Guillermo Scheibler, de febrero del 2021, que ordenó al Ejecutivo que implemente medidas de transparencia y protección del arbolado público”, explica a Tiempo Marían Angélica Di Giácomo, titular de la agrupación “Basta de mutilar Nuestros Árboles”.

Di Giácomo, recuerda que el GCBA tendría que haber avisado del procedimiento con diez días de anticipación, con un cartel en cada árbol indicando un número de contacto donde se pueda obtener información genuina, pero que en lugar de respetar dicho procedimiento legal, decidieron cerrar el Parque.

Para la titular de “Basta de mutilar”, el procedimiento está plagado de irregularidades porque “además tendrían que haber presentado el informe técnico que pedimos para cada intervención, la firma del profesional responsable de la decisión, y la publicación en el Boletín Oficial de la resolución al respecto de la presidenta de la Junta Comunal 4. Todas estas cuestiones nunca las realizaron”, agrega.

En el mismo sentido, Di Giácomo adelantó a este medio que pedirá la realización de un estudio sobre esos árboles, que sea independiente al gobierno porteño.

“Puede ser que haya una infección, no sabemos en cuantos árboles. Pero lo que nosotros vamos a pedir es la posibilidad de verlos antes de que los maten o de que intenten matarlos. El fallo del Juez Scheibler es claro: ‘no se puede hacer de espaldas a la ciudadanía el cuidado del arbolado, porque el arbolado es un bien común’. Entonces, esto que ellos hicieron es contrario a la Ley porque no nos dan la oportunidad de ver y de consultar a un profesional o a una profesional independiente. Eso es lo que nosotros quisiéramos hacer, que alguien independiente realice un estudio profundo sobre esos árboles porque, por lo que hemos venido viendo en estos 10 años de trabajo, no se puede confiar porque prima la destrucción”.

Por último, Di Giácomo aseguró que el GCBA “hasta ahora ha trabajado a espaldas de la ciudadanía en el Parque, impidieron que observemos a los árboles. En todos estos años, no hemos visto nunca la voluntad de preservar y cuidar a nuestros árboles, ni desde el Ejecutivo porteño, ni en las juntas comunales, sino todo lo contrario”.

La dilación de CABA en responder sobre el tema

El domingo 18 de febrero, un grupo de vecinos, vecinas y especialistas acercó la denuncia a Tiempo sobre una inminente tala indiscriminada de más de 40 árboles en Parque de los Patricios. El dato era muy fuerte para no tenerlo en cuenta sobre todo, cuando esa acción, implicaba la violación de la Ley de Arbolado Público.

Este medio se puso en contacto con la cartera de Espacio Público ese mismo día, para conocer si esto realmente era así y, en tal caso, cuáles eran los motivos. Ante la falta de respuesta se insistió durante tres o cuatro veces más durante la semana con la misma consulta. La respuesta llegó recién el viernes último (23 de febrero) a las 19:30, en forma de gacetilla y con algunas declaraciones del ministro de Espacio Público porteño Ignacio Miguel Baistrocchi.

Lo raro, es que este mismo comunicado que llevaba por título: “Por prevención reemplazarán 45 árboles infectados en el Parque de los Patricios”, fue entregado cuatro o cinco horas antes a otros medios (autodenominados “grandes medios), que carecían de la denuncia de especialistas y vecinos. Los portales de esos medios difundieron la gacetilla emulando ser un artículo periodístico y sin la demanda vecinal.

Esta dilación de tiempos de cinco días en responder a dos preguntas sencillas, y el envío del comunicado con anterioridad al resto de los medios en lugar de priorizar a quién indagó sobre el tema, tuvo el objetivo de informar “proactivamente” un tema sensible y, de alguna manera, neutralizar la denuncia de vecinos. Todo esto generó muchísimas dudas en si, la cantidad de árboles que van a talar del Parque están realmente infectados.

Jurisprudencia de la justicia porteña

En un fallo de 2021, ante un tema similar, el juez Guillermo Scheibler, del Juzgado Contencioso Administrativo, Tributario y de Relaciones de Consumo N° 13, aseguró que «no puede soslayarse que un árbol no es un integrante más del mobiliario urbano, fácilmente reemplazable, fungible en sus funcionalidades, como una farola, un banco de plaza o una parada de colectivos. Se trata de un ser vivo que nos acompaña y ayuda en el muchas veces difícil tránsito de habitar las grandes ciudades. Alcanzar su porte majestuoso le irroga décadas de crecimiento y cuidados, por lo que todo lo que hace a la gestión de este patrimonio no puede ni debe efectuarse a escondidas de la comunidad, a la ligera y sin los recaudos que la ley y el Plan Maestro elaborado por el propio GCBA imponen». «Se trata de un capital verde que recibimos en sus ejemplares adultos de las generaciones que nos precedieron y que debemos proteger y legar a las que nos sucedan con el agregado de nuevos ejemplares», concluyó.