El riesgo país descendió por debajo de la psicológica barrera de los 1.000 puntos que había franqueado a comienzos de esta semana. El indicador que elabora la banca JP Morgan terminó el martes en 970 puntos, con una baja de 43 unidades con respecto a la víspera.

La caída se produjo en medio de un repunte de acciones y títulos locales, al conocerse que la Fed (Reserva Federal de Estados Unidos) evalúa bajar la tasa de interés en caso de un recrudecimiento en la guerra comercial entre ese país y China. Si así ocurriera, podría reaparecer el apetito de los inversores por otros activos con mayor rendimiento. Dentro de ese panorama, algunos bonos argentinos mejoraron en casi 5% su cotización. En el mercado local, además, el dólar se mantuvo levemente por debajo de los $ 46, apoyado en la liquidación de divisas por parte del sector agroexportador, mientras que las acciones más representativas de la Bolsa porteña subieron 2,8%.

A pesar de que la jornada arrojó un saldo positivo para la mayoría de los indicadores financieros, la situación dista de ser tranquila. El riesgo país, tomado en cuenta por los fondos extranjeros a la hora de decidir sus inversiones, se encuentra en los valores más altos de la era Macri. El récord de 1.013 puntos básicos registrado el lunes, después de seis rondas consecutivas en alza, más que duplica los 434 puntos de un año atrás.

El índice es confeccionado en base al rendimiento de los bonos más representativos emitidos por un país y su diferencial con respecto al de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, que se toman como referencia. Los altos valores del riesgo país argentino se deben a que los inversores intentan desprenderse de los títulos emitidos por el gobierno; al haber un exceso de oferta, su precio en el mercado secundario baja y la tasa de interés que rinden es mayor. Las dudas sobre el repago de esas obligaciones, teniendo en cuenta la desmesurada cantidad de vencimientos que acumuló el gobierno en el mediano plazo, sumadas a la inestabilidad cambiaria y al peligro de que el oficialismo no logre su reelección en los comicios de octubre exacerban la tendencia a deshacerse de bonos argentinos.