La Unión Europea de Radiodifusión (UER) confirmó que Israel participará en el Festival de la Canción de Eurovisión 2026, una decisión que desató retiros inmediatos y profundizó la fractura política que atraviesa al concurso desde el inicio del genocidio en Gaza. Durante la 95ª Asamblea General de la UER, que se inauguró en Ginebra, los organizadores resolvieron no someter a votación la continuidad de Israel en el certamen, pese a que varias delegaciones habían solicitado expresamente un sufragio secreto.
La ausencia de votación derivó en una ola de protestas: España, Países Bajos, Eslovenia e Irlanda anunciaron que no competirán en la edición 2026. El retiro español fue el primero en oficializarse. La cadena pública RTVE informó que dejará de participar en Eurovisión tras la decisión adoptada en Ginebra, al considerar que la permanencia de Israel en el festival contradice la postura que España sostiene frente a la crisis humanitaria en Gaza.
Irlanda, que había advertido que no participaría en Eurovisión si Israel era admitido, confirmó que no solo se retirará del concurso sino que tampoco lo transmitirá el próximo año. La emisora estatal RTE calificó como “inadmisible” la participación israelí “dada la terrible pérdida de vidas en Gaza”.
Eslovenia también dio un paso al costado y cuestionó con dureza la falta de votación secreta: su televisión pública señaló que, junto con España, Montenegro, Países Bajos, Turquía, Argelia e Islandia, había solicitado ese mecanismo para definir la presencia de Israel, pero la moción fue desestimada.
Eurovisión 2026 será en Viena
Del otro lado, varias emisoras defendieron la decisión. La cadena alemana SWR aseguró que la televisión israelí KAN “cumple todos los requisitos” para competir. El canciller alemán, Friedrich Merz, incluso había advertido en octubre que excluir a Israel sería “escandaloso” y que Alemania podría boicotear el concurso en ese caso.
La tensión arrastra varios episodios recientes: los abucheos dirigidos a la representante israelí Eden Golan en 2024, y las controversias con la votación en 2025, en un clima marcado por las repercusiones culturales de la guerra. Pese a las deserciones, la UER confirmó que Eurovisión 2026 se realizará en Viena, del 12 al 16 de mayo, ciudad que será sede del festival por tercera vez tras las ediciones de 1967 y 2015.
