Es una de las cantantes y compositoras emergentes más audaces surgida en los últimos años. Su búsqueda musical y sonora parece estar en constante evolución y cuenta con una puesta en escena cuidada, donde mezcla su raíz folklórica con ritmos urbanos, haciendo cada uno sus conciertos un verdadero carnaval performático. Por eso todo aquel que descubra a Feli Colina, salteña, feminista, ecléctica y multiforme, difícilmente la olvide. Para quienes tengan alguna duda podrán encontrar las mejores respuestas este sábado en el teatro Coliseo, allí continuará prestando su último trabajo lanzado el año pasado, su tercer álbum de estudio, Lxs Infernales (del Valle Encantado), producido por Nico Cotton.
Con este disco la artista salteña abrió la puerta a un universo compuesto por siete canciones donde homenajea a Los Hermanos Ábalos, Sandro, Margarita Lecuona, el Cuchi Leguizamon con Manuel Castilla y Ariel Ramírez. Pero bien a su manera. “Eran canciones que hacíamos en los conciertos para divertirnos”, cuenta la cantante. Este trabajo es la continuidad del segundo álbum de la joven artista, editado en marzo de 2022, titulado El Valle Encantado, nominado a los premios Gardel 23′ como Mejor Álbum de Folklore Alternativo. El primer disco de la cantante y compositora fue el resultado de haber ganado el concurso Camino a Abbey Road, lo que le permitió grabar su primer álbum en Londres, en los icónicos estudios inmortalizados por los Beatles. El crecimiento de Colina le permitió el año pasado ser parte en festivales importantes como Primavera Sound, Quilmes Rock, Cosquín Rock y Futuröck, entre otros.
La banda que la acompaña, Lxs Infernales, está conformada por Agustín Colina en bajo, Manuel Figuerero en batería y Baltazar Oliver en teclados. Ella reconoce que la clave para su electrizante y poderosa música, donde puede recorrer con comodidad diferentes géneros, es haber formado este grupo: “Es una suerte crear y compartir con músicos con los que tenés química y podés decidir por dónde ir. Lxs Infernales (del Valle Encantado) es una selección que hicimos entre todos: temas de folklore nacional sobre todo, más alguna cosita que hacíamos en los recitales del disco anterior que era más oscuro. Tuvimos ganas de grabarlo para que quede. Era la parte más divertida de nuestro show y está bueno que también esté disponible.”
-¿Cuál fue el criterio de selección de cada uno de los autores elegidos?
-Eran canciones que nos gustaban. Son canciones conocidas, que te divierten, que te dan ganas de bailar y bueno, fuimos por ahí. Con la banda decidimos en la sala de ensayo cómo las íbamos a hacer, qué toque personal les íbamos a dar. Lo dejamos lo más crudo posible, porque así me gusta que queden los discos, pero no hubo mucho más. Eran temas reconocibles y ahí estaba la clave. No fue algo demasiado premeditado.
-¿Cómo te sentís con el camino que venís recorriendo?
-Me siento a gusto. Es lindo hacer lo que a uno le gusta, pero obvio que tiene sus complicaciones, como todo. Este es un trabajo en el cual te involucras mucho, en todos los planos, emocional, física y mentalmente, entonces siempre se da todo. Hay mucho de disfrute, pero también de compromiso. Es complejo sortear las frustraciones, las ansiedades y todo lo conlleva dedicarse a esto. Pero estoy contenta y sigo eligiendo seguir haciendo esto.
-¿Cómo encontraste tu estilo? ¿Cómo sabes por donde ir y buscar en cada canción?
-Lo voy sintiendo. Por ejemplo, con mis dos últimos discos, fue claro. Estuve escuchando mucho folklore durante la pandemia, extrañaba mucho Salta, entonces esa sonoridad me volvió a impregnar. Entonces le di la forma que me salió. Que tiene que ver con mi forma de interpretar o comunicar lo que quiero decir, y también con mis propias limitaciones. Es como me sale. Nada es una idea muy premeditada. Soy detallista en lo que hago, pero tiene que ver con hacer lo que me vaya gustando: me gustaba el folklore, pero su forma clásica no era lo que más me representaba, entonces me puse a indagar en cómo lo haría yo. Agarré los elementos que más me llamaban la atención y lo pude traducir a mi idioma.
-¿La situación actual, el ataque a la cultura y las mujeres, que te produce como artista y persona?
-La verdad que estoy asqueada, espantada, catatónica desde el día que asumió este personaje. Me cuesta creer que nos pase esto. Todo este Gobierno y sus planes son una película de ciencia ficción, o de terror, para ser más exacta. No sé cómo llegamos como pueblo a tomar esta decisión. Estoy indignada con lo que pasa. La confusión y el espanto me invaden. Espero que podamos pegar un volantazo para algún lado, pero no se ve bien por dónde. Pero hay que resistir. El arte es inmortal, no van a poder callarnos, o evitar que queramos contar algo o decir lo que pensamos. El arte y la cultura es un derecho, pero también parte de la naturaleza humana. Creo que todas estas posturas que hoy están en el poder van a generar una resistencia potente, una idea de defender las convicciones con más fuerza, de una manera menos vaga. Los artistas trabajan con emociones y esto nos conmueve, por lo que para mí es inevitable que esto nos fortalezca y la cultura nacional sea más valorada.
-¿Lo importante es seguir haciendo?
-Sin dudas. Yo ya estoy pensando en un próximo disco. Hay que tocar y hacer discos, tocar y hacer discos y así. No dejar que nos detengan. Para mí lo que hago es una constante búsqueda de maneras de transmitir ideas y sentimientos, soy curiosa por explorar, por ensayar y poder compartir lo hago.
Feli Colina en vivo
Presentará Lxs Infernales (del Valle Encantado) este sábado 13 de abril a las 21 en el Teatro Coliseo, Marcelo T. de Alvear 1125.
