En 1990, se abrieron las puertas de La Homero Manzi en el corazón de Boedo y nunca más se volvieron a cerrar. Con años de formación y de trabajo en el barrio, este sábado 15 de noviembre, desde las 17 y hasta la medianoche, el espacio cultural independiente más antiguo de Buenos Aires celebrará su aniversario con una fiesta popular que resume su historia de resistencia, identidad y organización colectiva.

La esquina emblemática de Avenida Belgrano y Boedo será escenario de más de diez bandas y artistas que homenajearán a un proyecto que sobrevivió a crisis económicas, políticas y a las transformaciones culturales de las últimas décadas sin renunciar a su esencia.

A lo que los hizo pensar en armar el proyecto. En hacerlo crecer y pasar de una fachada antigua a un lugar renovado y apto para todo tipo de iniciativas culturales. Es por eso que, quizás, tantas bandas vinculadas a La Homero Manzi decidieron hacerse presente para un gran evento.

El cierre será muy especial a cargo de los Charros, pero además pasarán por el escenario la reconocida cantante, jinglera y artista Mariu Serrano, Willy Bronca, Sergio Zabala, Mabel Cumbia, Mamazuka, Huinca Machao, La Cofradía del Gotán, junto con la murga La Gloriosa de Boedo y los talleres de la casa, que hace años son semillero de nuevas voces. Toda una invitación abierta a bailar, abrazarse y celebrar la alegría compartida en la que también habrá stands de organizaciones cercanas. 

Pero la celebración no es solo un cumpleaños. Es, como siempre se expresa en La Homero Manzi, una declaración política. “Tomamos la avenida para festejar una historia de lucha, de resistencia, de alegría y de amor. Celebramos estos 35 años no por nostalgia, sino por compromiso”, dicen las y los referentes del espacio, en una frase que bien podría funcionar como manifiesto.

En tiempos en que la cultura popular se vuelve un territorio en disputa, el festival es también un mensaje para intentar demostrar que el arte sigue siendo una herramienta de transformación y que la comunidad organizada defiende sus espacios.

La Homero Manzi, mucho más que un centro cultural

Homero Manzi

A lo largo de su historia, La Homero Manzi fue mucho más que un centro cultural. Fue refugio, trinchera, escuela, casa. Todo a la vez. En sus paredes se sostuvieron talleres aún en los momentos más difíciles, así como en su escenario convivieron el tango, el rock, la murga y la poesía.

Se armó red en el salón con quienes necesitaban un abrazo, un espacio de creación o simplemente un lugar donde no estar solos. Un espacio donde la cultura no es un servicio, sino un derecho; donde la organización comunitaria se convierte en forma de vida y la solidaridad una bandera, tal como hizo este espacio con Tiempo Argentino para ser la segunda casa para editar el documental De la Resistencia a la Existencia.

Con entrada libre y gratuita, las calles porteñas de Boedo serán una fiesta popular para celebrar un año más y seguir apostando por la cultura y la construcción colectiva de la felicidad. Cada abrazo, cada baile y cada voz que se sume sobre serán parte de la misma apuesta que hace 35 años mantiene a este espacio de pie.