Este sábado por la tarde, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner fue ingresada en el Sanatorio Otamendi luego de presentar una dolencia abdominal aguda. El cuadro motivó un operativo médico y judicial para garantizar su atención inmediata.
El episodio comenzó en su departamento del barrio porteño de Constitución, donde la exmandataria cumple arresto domiciliario. Tras manifestar un fuerte malestar físico, un equipo de profesionales médicos acudió al domicilio para realizar una revisión de rigor.
Luego de los primeros chequeos, los facultativos determinaron que era necesaria una evaluación más exhaustiva y de mayor complejidad, la cual no podía realizarse en el domicilio.
Debido a su situación procesal, se tramitó la autorización judicial pertinente para permitir su salida de la vivienda. Una vez obtenido el permiso, fue derivada al Sanatorio Otamendi, ubicado en el barrio de Recoleta, donde permanece internada bajo observación.
Hasta el momento, no se han brindado detalles específicos sobre el diagnóstico definitivo. Fuentes allegadas y el entorno de la exmandataria confirmaron que se le realizarán estudios complementarios para determinar el origen del dolor. La evolución de su estado de salud será comunicada oficialmente a través de los partes médicos que emita la institución de salud.
