El Ministerio de Defensa de Israel dio este miércoles el visto bueno definitivo a un controvertido plan de asentamientos en Cisjordania -que prevé la construcción de 3.400 viviendas y la separación de Jerusalén Este-, que supone la práctica eliminación del «engaño» de la solución de dos Estados, en palabras de uno de sus impulsores, el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich.

«El Estado palestino está siendo borrado de la mesa no con lemas, sino con hechos. Cada asentamiento, cada barrio, cada vivienda es otro clavo en el ataúd de esta peligrosa idea«, celebró Smotrich, quien forma parte de unos de los sectores más reaccionarios de un gobierno israelí de por sí ultraderechista.

Se trata de un polémico plan urbanístico que abarca unos doce kilómetros cuadrados -denominada zona E1- y conecta Jerusalén Este con el asentamiento de Maale Adumim. La idea es duplicar su población con hasta 35.000 nuevos residentes para los próximos años con la ampliación del barrio de Tzipor Midbar.

Su construcción dividiría Cisjordania en dos, una al norte y otra al sur, haciendo casi imposible la creación de un Estado palestino conectado, tal y como el propio Smotrich se encargó de celebrar hace una semana cuando presentó el plan, ahora aprobado por un comité que depende del Ministerio de Defensa.

Se trata, según insistió Smotrich, de «un paso significativo que prácticamente borra el engaño de los dos Estados y consolida el control del pueblo judío sobre el corazón de la tierra de Israel», recoge The Times of Israel.

La idea de que este plan amenaza gravemente la viabilidad en el futuro de un Estado palestino es compartida por organizaciones como Paz Ahora, que han estado haciendo campaña en contra de la expansión de los asentamientos israelíes.

«Bajo el pretexto de la guerra, Smotrich y su minoría de amigos mesiánicos están estableciendo un asentamiento delirante que tendremos que evacuar en cualquier acuerdo», denunció esta organización, insistiendo en que la única manera de vivir con seguridad en Israel «es dentro del marco de dos Estados».

En medio de todo ello, varios países como Francia, Canadá y Australia, ya adelantaron su posición de sumarse al reconocimiento casi unánime del Estado palestino, en una sesión extraordinaria de la Asamblea General de Naciones Unidas en septiembre.

En tanto, el Ejército de Israel se encuentra perfilando su operación para tomar la ciudad de Gaza e informó que está previsto el despliegue de miles de reservistas para sacar adelante con éxito una operación que ya ha bautizado como «Carros de Gedeón 2».

Cinco divisiones de las Fuerzas Armadas participarán en los planes del Ministerio de Defensa, que busca «acabar con Hamás» y eliminar al grupo armado palestino de la ciudad de Gaza, tal como explicó un alto cargo del Ejército al diario The Times of Israel.

BB con Europa Press