En la víspera de la Navidad y de cara al fin de año y el inicio de la temporada de vacaciones, el gobernador Axel Kicillof criticó duramente al gobierno de Javier Milei: “Es más barato irse a comprar ropa o vacacionar afuera que consumir lo que producimos acá. Eso es una sentencia de muerte para la industria nacional y para el turismo en nuestras ciudades”, disparó.

Luego del re lanzamiento de su espacio político, el Movimiento Derecho al Futuro, en Ensenada, este miércoles el gobernador bonaerense realizó un crudo diagnóstico sobre la situación económica y política del país durante una entrevista con el programa Mañana Silvestre en Radio 10.

Kicillof hizo especial hincapié en el “atraso cambiario” y su impacto devastador en la balanza turística. Según datos recientes del INDEC, en noviembre la llegada de turistas extranjeros cayó un 2,7%, mientras que la salida de argentinos al exterior creció un 15,3%, arrojando un déficit de 224.000 personas.

En ese camino denunció un intento del Gobierno nacional de “invisibilizar” la crisis. Criticó duramente la decisión de dar de baja convenios de medición turística con el INDEC ante los resultados desfavorables: “Prefieren romper los convenios para que no se sepa cuánto está sufriendo nuestra Costa Atlántica o nuestras sierras. Atacan al termómetro en lugar de curar la enfermedad”, lanzó.

“Es un desastre que están haciendo. No hay sectores económicos en la provincia de Buenos Aires al que le vaya bien: gastronomía, comercio, turismo e industria con una crisis gravísima y con algunos elementos difícil de revertir”, lanzó el mandatario.

Kicillof aseguró que el programa del gobierno “no es un plan de estabilización, es un plan de ajuste clásico”, pero agregó que Milei lo implementa “con una dosis de improvisación y de crueldad que no habíamos visto”.

“Están gobernando para los mercados, para los acreedores y para el Fondo Monetario, mientras le dan la espalda a la gente que no puede pagar la luz, el gas o los alimentos”, remarcó. Y aseguró: “Están destruyendo el mercado interno a propósito”.

En esa línea remarcó que es “dramático” lo que generó el gobierno nacional en términos económicos en la Provincia de Buenos Aires: “Los dueños de las Pymes te dicen que no es solo que no pueden pagar la paritaria, es que no tienen a quién venderle. Cerraron el grifo del consumo, subieron los costos de la energía de manera sideral y ahora pretenden que las empresas compitan con productos importados que vienen subsidiados. Es un industricidio”, cerró.

Por eso, recordó que Milei quiere “volver a las recetas de los ‘90 que ya fracasaron y nos dejaron en la calle”.

“Hablan de vender Aerolíneas, de vender nuestras centrales nucleares, de entregar YPF. No es una cuestión de eficiencia, es un remate de los activos estratégicos de la Argentina para pagar deuda que ellos mismos están generando”, redondeó.

Kicillof duro contra el Gobierno: “Es un desastre lo que están haciendo”
El gobernador relanzó el martes su espacio político con un acto en Ensenada.

Las deudas con las provincias

Kicillof recordó que el Gobierno Nacional le adeuda a la provincia de Buenos Aires cerca de 11.000 millones de dólares. Este monto incluye obras paralizadas, fondos de seguridad, incentivos docentes y transferencias para la caja jubilatoria.

“No es plata de un gobernador, es plata que debería estar en las escuelas, en las patrullas y en los bolsillos de los trabajadores”, apuntó.

En esa línea y con la mirada puesta en la sesión del Senado de este viernes para tratar el presupuesto 2026, Kicillof describió la estrategia oficialista como un “mecanismo de extorsión permanente”, en el quela obra pública y los recursos provinciales son usados como “moneda de chantaje” para forzar a los legisladores a votar leyes que perjudican a sus propios representados.

Sin embargo, señaló una creciente resistencia en el Congreso: “Entienden que el modelo de Milei es profundamente unitario y centralista, aunque se llenen la boca hablando de libertad”, afirmó.