En una secuencia cargada de emotividad, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, despidió este jueves al fallecido exmandatario de Uruguay, José «Pepe» Mujica, en el velatorio realizado en el Palacio Legislativo de Montevideo por el que desfilaron miles de uruguayos.

«Pepe Mujica era un ser humano superior, una persona que intentó cambiar el mundo con la singularidad, la competencia política, con la capacidad de hablar sobre todo con la juventud», dijo Lula minutos después de fundirse en un abrazo con Lucía Topolansky, esposa de Mujica y exvicepresidenta de Uruguay.

Lula, quien llegó acompañado por su esposa Janja, se ubicó frente al féretro de Mujica que estaba envuelto con la bandera nacional y la de Artigas, y conversó con el presidente uruguayo, Yamandú Orsi.

Visiblemente emocionado, Lula subrayó el carácter «extraordinario» de Mujica, recordando su paso de 14 años por la cárcel durante la dictadura, y cómo, pese a eso, salió «sin odio» hacia sus verdugos.

«Conocí en mi vida a mucha gente, muchos políticos, mucha gente que me gusta, que respeto, pero Pepe era especial. Pepe era aquella figura más cariñosa, aquella figura en la que aprendí a respetar, a admirar y a seguir cada paso que tomaba después de que asumió la presidencia de Uruguay. No podía dejar de despedirme de él y de su esposa, que tanto como Pepe es una figura muy admirable», sostuvo el mandatario brasileño.

En un cierre, Lula evocó la reciente muerte del papa Francisco, a quien también definió como un ser humano excepcional: «Ahora Pepe lo acompaña. Y espero que, donde estén, sigan bendiciéndonos para que la humanidad sea más generosa, más fraterna y la política más digna y respetuosa».

También estuvo presente el presidente chileno Gabriel Boric, quien difundió un mensaje en la red X, acompañado por una serie de fotos, con la frase: «La vida pasa, las causas quedan. Gracias Pepe querido, te llevaremos en cada lucha».

Lula y Boric estaban en Beijing participando del IV Foro China-Celac cuando recibieron la noticia de la muerte de Pepe Mujica.

El velatorio finalizó sobre las 16:40, cuando se cerraron las puertas del Palacio Legislativo para un último homenaje privado con Mauricio Rosencof, quien recitó un poema junto al féretro.

«Haz por los demás lo que quieras para ti mismo, esa es la ley, lo demás es comentario», dice uno de los fragmentos que leyó el escritor en el homenaje final a Mujica.

Luego, en la explanada del Palacio Legislativo, Mario Carrero interpretó la canción «A don José».

Se estima que entre este miércoles y el jueves más de 100.000 personas pasaron por el Palacio Legislativo para despedir a Pepe Mujica.

Mujica murió el martes a los 89 años en su modesta finca en la periferia de Montevideo. Le habían diagnosticado cáncer de esófago un año atrás.

Los restos mortales de Mujica serán cremados mañana y esparcidos en su chacra, en una ceremonia estrictamente privada.

GS con información de NA