Pocas horas antes de que se vencieran los plazos para presentar las candidaturas presidenciales en Venezuela, la opositora Plataforma Unitaria dio un giro inesperado y presentó, en lugar de María Corina Machado, a una candidata desconocida con escasa participación en política y ninguna experiencia en gestión pública. Sin embargo, los dirigentes opositores intentaron mostrarse entusiasmados –o al menos no críticos- con la posibilidad de que Corina Yoris, una académica de 80 años, con amplia trayectoria en el campo de la filosofía, la historia y las letras, logre captar el grueso del voto antichavista. La decisión fue anunciada por la propia Machado y quedó en claro que la estrategia fue poner una figura “de consenso” que pudiera atraer a su propio electorado, ya que debió declinar su candidatura a pesar de haber ganado masivamente una interna en octubre. La razón es una sentencia judicial que la inhabilita para ejercer cargos públicos por 15 años, por una acusación de corrupción y de pedir sanciones extranjeras contra su país. Lo que también quedó claro es que Machado impuso esa estrategia, que es la única que le deja abierto el camino a revisar su sentencia y aspirar al poder. Por un lado porque, según dijo, pretende seguir insistiendo en revertir su situación hasta las últimas instancias previas a la elección fijada para el 28 de julio, y por otro, porque un candidato fuerte, con peso propio y distanciado de ella, tal como habría ocurrido con algunos nombres que estaban circulando, no habría permitido esa revisión, ni antes de la elección, ni mucho menos luego de eventualmente ganarle al oficialismo del presidente Nicolás Maduro.

Esto quedó reflejado cuando Machado, líder del partido Vente Venezuela y representante de la derecha acomodada local, anunció la elección de Yoris el viernes por la noche: “Hemos encontrado una persona de mi total confianza, honorable, que va a cumplir este trámite con el apoyo y la confianza de todos”, dijo y aclaró que la decisión surgió “de una discusión del seno de las fuerzas unitarias”. Además, ratificó su decisión de seguir en la carrera: “Todos saben que mi lucha por la habilitación no se para, que la ley establece que hasta diez días antes de la elección puede haber una sustitución”.

La última semana fue crítica para la oposición, que se debatía entre quedarse nuevamente fuera del escenario electoral y apostar a la deslegitimación de los comicios, como lo intentó infructuosamente en 2018, o abrirse al juego electoral aceptando la imposición judicial de tener que presentar un candidato diferente. Machado ya venía hablando de que tenía un plan que mantenía en reserva y que no pensaba aceptar “más traiciones”. La situación empeoró el miércoles cuando la fiscalía detuvo a siete de sus colaboradores y dictó orden de captura a otros siete por el cargo de «acciones desestabilizadoras», entre quienes figura su mano derecha, Magalli Meda, quien asomaba como posible sustituta. Machado tachó estas acciones de «brutal represión». Poco después, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó su “preocupación” por las “continuas detenciones y órdenes de aprehensión contra miembros de la oposición” venezolana y exigió la celebración de elecciones “libres, justas y competitivas” con candidatos en “igualdad de condiciones”.

Antes de comunicar la decisión de la PU, circularon nombres como el gobernador de Zuliá, Manuel Rosales, y el negociador de la mesa de Barbados, Gerardo Blyde, ambos en condiciones de presentarse, aunque ninguno con la bendición de Machado. Para el exgobernador de Miranda y excandidato presidencial del partido Primero Justicia, Henrique Capriles, la estrategia debía estar en el terreno electoral. El viernes celebró el anuncio: “El pueblo venezolano quiere votar y elegir libremente y para ello tener opción! ¡Ahora más que nunca Unidad y Voto!”.

Yoris se presenta como “filósofa y profesora universitaria”. Es licenciada en filosofía, en letras, doctora en historia, docente de lógica y recientemente nombrada miembro de la Academia Venezolana de Lengua. Su trayectoria académica es profusa y reconocida, pero su única experiencia política parece haber sido integrar la Comisión Nacional de Primaria 2023, producto de su relación personal con Machado.

El chavismo no se había pronunciado aún sobre esta decisión. Pero algunos análisis cercanos a los unitarios lo consideraron un “error”. El columnista del diario El Nacional, Esteban Oria, tuiteó: “Imagino que (Yoris) tiene una excelente trayectoria académica, además su imagen es de abuela, de mamá grande, lo cual es genial, pero… ¿podrá este mensaje inspirador enfrentarse a Maduro? ¿Podrá esta señora motivar a la base política?”, se preguntaba, para responderse que no: “Me da la impresión de que es como lanzarle un colibrí a un águila, un conejo a un lobo”.  «