El presidente Javier Milei le tomó juramento al Teniente General del Ejército Argentino, Carlos Presti como ministro de Defensa, en una ceremonia exprés en la Casa Rosada, consumando el regreso de un militar a la gestión política del Estado nacional desde del 10 de diciembre de 1983, cuando concluyó la dictadura y regresó de la democracia.
Presti fue acompañado por funcionarios del Gobierno, familiares, amigos y efectivos de las fuerzas para asumir formalmente el cargo en el que reemplazó al mendocino Luis Petri, quien asumió como diputado nacional. El funcionario cuenta con firma en la cartera desde el jueves 11, pero este viernes quedó habilitado para instrumentar los cambios que considere pertinentes.
Al momento de su desgnación, Presti era el Jefe del Estado Mayor General del Ejército. Su nombramiento despertó el rechazo de un sector de la oposición y algunas críticas al interior de la fuerza que reclamaban su retiro. Sin embargo, el propio Presti reveló que se tomaría licencia para asumir al cargo en el Poder Ejecutivo, es decir que no pasará a retiro para no perder el rango militar.
Presti es un militar de carrera y es hijo de otro militar: Carlos Roque Presti, quien estuvo al frente del Regimiento de Infantería 7 de La Plata durante la última dictadura cívico militar, desde donde comandaba el Área Operacional 113 que tenía bajo su órbita los centros clandestinos de detención, tortura y extermino como La Cacha, Destacamento de Arana y Comisaría 5ta. Fue procesado en juicios por crímenes de lesa humanidad, pero murió antes de que le llegara la condena.

El flamante Ministro de Defensa se formó en el Colegio Militar de la Nación, de donde egresó en 1987 como subteniente de infantería y ocupó cargos como comandante de la IV Brigada Aerotransportada, jefe del Regimiento de Asalto Aéreo 601 y director del Colegio Militar.
Asimismo, participó en misiones internacionales como jefe del batallón argentino de paz en Haití y tuvo experiencia diplomática como agregado de Defensa en varias embajadas centroamericanas.
A finales de 2023, fue designado jefe del Estado Mayor General del Ejército por decreto en un recambio de alto nivel que implicó el pase a retiro de 22 oficiales superiores más antiguos dispuesto por Milei.