¿Reemplazar el Premetro por colectivos? Esta pregunta resonó en las últimas semanas y finalmente el propio jefe de Gobierno, Jorge Macri, confirmó que así será. El mandatario porteño pretende eliminar el histórico Premetro y en su lugar instalar los nuevos colectivos eléctricos Trambús.
“En la traza del Premetro es mucho más fácil poner hoy un colectivo eléctrico, un Trambús. [El Premetro] es un trencito muy chico, lleva muy poca gente. La traza ya la tenemos construida, ahí mismo podemos meter otra forma de vehículo”, dijo Macri al ser consultado por el programa Economía de Quincho.
Aquí hay varios puntos que los propios metrodelegados cuestionan. Ellos mismos, en los últimos años, presentaron varios proyectos de modernización del Premetro para el desarrollo de la zona sur, acorde al mundo del transporte actual. En ese sentido, aseguran que la Ciudad tiene un transporte con más de 40 años. El proyecto presentado optimizaría el espacio público de la zona Sur.
Un dato a tener en cuenta: la capacidad actual de los coches del Premetro es de 137 pasajeros (32 sentados y 105 de pie), el doble que los 60 pasajeros que entran en un “Trambús” de 12 metros de largo.
Desde el portal especializado en la temática EnElSubte, sostienen que “esta capacidad puede ser incrementada de forma muy sencilla con reformas como las implementadas -a muy bajo costo- por la concesionaria Emova, que modificó la distribución de los asientos interiores para permitir una mayor cantidad de pasajeros de pie. Las unidades articuladas modernas, como la que el Gobierno de la Ciudad tiene arrumbada sin uso en el Laboratorio Patrimonial Centenera, admiten hasta un total de 200 pasajeros, más del triple que un ómnibus”.
En el mismo informe sostienen que otro factor a considerar es la amortización del material. “Las unidades tranviarias, al igual que los vehículos ferroviarios en general, tienen una vida útil aproximada de 30 años -los coches del Premetro llevan casi 40 años en servicio sin mayores inconvenientes-, mientras que los colectivos tienen una notablemente inferior: de acuerdo con disposiciones del propio Gobierno de la Ciudad, la antigüedad máxima tolerada es de 10 años”, aseguran.
El proyecto choca con una obra del propio gobierno
El proyecto confirmado por el jefe de Gobierno porteño se contrapone con una obra que, semanas atrás, Subterráneos de Buenos Aires S.E. (SBASE) adjudicó a una privada para el tendido de 850 metros de vías en Villa Lugano con el objetivo de unificar los dos ramales existentes.
Desde el sector aseguran que es una obra demorada hace más de 40 años y que, de concretarse, permitiría un mejor aprovechamiento del material rodante e incrementar la frecuencia, uno de los puntos sobre los que Jorge Macri basó su argumento para un posible reemplazo por un Trambús.
Otro dato a tener en cuenta es que el proyecto confirmado por Macri no está incluido en el Presupuesto 2026 aprobado la semana pasada en la legislatura porteña. Tampoco incluye mención alguna a la compra de diez nuevos coches para la línea.
