El juez federal Daniel Rafecas ordenó una nueva captura internacional para el vaciador de medios de comunicación Mariano Martínez Rojas, por la interrupción del servicio de Radio América mediante la irrupción violenta en su planta transmisora.

Martínez Rojas está actualmente detenido en Miami, a la espera de que se resuelva su situación migratoria. Insólitamente, ese trámite –que demora por lo general muy poco tiempo- lleva meses estancado en los tribunales norteamericanos. Alejandro Sánchez Kalbermatten, el ex abogado del empresario, también requerido por la Justicia argentina por supuestas operaciones fraguadas de importación y exportación, había pedido una visa especial para asilados políticos. Si bien ese trámite no se terminó de concretar, todo indica que es lo que demora la resolución de la situación de Martínez Rojas.

El 11 de junio de 2016 Martínez Rojas entro con un grupo de personas a la emisora Radio América, en la planta situada en Pergamino 4055. Allí, según los testigos alegando ser el nuevo dueño de la empresa Deluxe S. A. –supuestamente titular de la emisora- ordenó la interrupción de la grilla de emisión e hizo cesar la transmisión.

Esa conducta implica un delito, contemplado en los artículos 194 y 197 del Código Penal, que establece penas de entre tres meses y dos años de prisión para el responsable de la “interrupción de las comunicaciones”.

El delito que se le imputa, normalmente, no implica la orden de detención. Pero Martínez Rojas está prófugo en otras causas y, en ese escenario “a efectos de ser llamado a prestar declaración indagatoria se libró orden de captura”.

El vaciador de medios sumó así su tercera orden de captura internacional.