Abuelas de Plaza de Mayo consideró “un claro retroceso en el proceso de Memoria, Verdad y Justicia”, la postulación de Pedro Federico Guillermo Hooft para cubrir la vacante del Juzgado Federal de Primera Instancia N° 1 de Mar del Plata, donde tramitan causas por delitos de lesa humanidad. El organismo informó su postura con un comunicado luego del encuentro con Cristina Fernández de Kirchner en el Senado de la Nación, donde junto con Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora e H.I.J.O.S rechazaron el pliego del magistrado propuesto por el Ejecutivo.

El organismo que preside Estela de Carlotto aseguró en un comunicado que la designación de Hooft como juez federal de Mar del Plata “pondría en riesgo las causas por delitos de lesa humanidad en esa jurisdicción”.

Pedro Federico Hooft es hijo del juez marplatense homónimo denunciado como partícipe de delitos de lesa humanidad durante la última dictadura, y está involucrado entre otros hechos en la “noche de las corbatas”. Pero la oposición de los organismos no radica en su parentezco filial con el juez Pedro Hooft, sino en que el funcionario obstaculizó las investigaciones por esos hechos. 

El pliego de Hooft se tratará este miércoles en el Senado y fue seleccionado por el Poder Ejecutivo de una terna de candidatos que el Consejo de la Magistratura elevó en octubre de 2018. En la impugnación que el lunes llevaron los organismos a la Comisión de Acuerdos del Senado, pidieron a los senadores “que no convalide con su acuerdo a un funcionario que no fue consecuente con la búsqueda de verdad y justicia por los crímenes del terrorismo de Estado”.

En la impugnación, los organismos indicaron que Hooft no cumple con los requisitos vinculados al claro compromiso con los derechos humanos. “Su conducta como funcionario judicial no resulta coherente con los estándares alcanzados en materia de juzgamiento de crímenes de lesa humanidad en nuestro país”, indicaron.

En su presentación al Senado señalaron actitudes “temerarias” del funcionario para garantizar la impunidad de crímenes realizados durante el terrorismo de Estado y remarcaron “la persecución contra quienes los investigan”.

“Está demostrado que el candidato ha obstaculizado las averiguaciones sobre los delitos de los que se acusan a su padre, a través de métodos ilegales como grabaciones subrepticias al fiscala cargo de la investigación, hecho que la Cámara Federal de Mar del Plata calificó como una grave falta ética”, indicó Abuelas en el comunicado. 

La preocupación del organismo es por la posibilidad de que el Juzgado Federal Nº 1 de Mar del Plata quede en manos de Hooft. En ese juzgado tramitan numerosas causas que investigan delitos de lesa humanidad sucedidos durante la última dictadura, entre ellos, varios casos de apropiación de bebés.

En la misma línea, Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora, remarcó que no repudian a Hooft “por portación de apellido”, sino por los hechos. “Es muy peligroso que sea juez una persona que no respeta los derechos humanos ni la memoria de nuestros hijos”, remarcó la Madre en declaraciones a Radio La Imposible.