La Policía de la Ciudad de Buenos Aires se hizo presente ayer en la sede de la Asociación Gremial Docente de la UBA (AGD-UBA), en la calle Chile al 2100. La presencia de un móvil policial en la sede del sindicato se produjo a minutos de la hora de convocatoria a una asamblea general para deliberar los pasos a seguir, frente a la creciente pérdida de poder adquisitivo que afecta el salario de los docentes universitarios.
Los efectivos policiales pretendieron ingresar a la sede, en una medida que los dirigentes de la AGD-UBA calificaron de “amedrentamiento”.
En un comunicado, el sindicato mayoritario de los docenes universitarios de la UBA, afiliado a la CONADU Histórica, sostuvieron que se trató de “una clara maniobra de intimidación”, en tanto los efectivos “interrogaron a los compañeros de la dirección del sindicato sobre la actividad que se iba a realizar e incluso requirió los nombres de los responsables”.
Además, denunciaron, “como si esto no bastara, dejaron una camioneta policial que permaneció a metros de la entrada del gremio hasta el fin de la asamblea”.
La comisión Directiva del gremio docente alertó que “esta acción se ha venido repitiendo contra otras organizaciones (el sábado ocurrió durante el Cabildo abierto convocado por trabajadores del Garrahan) y conecta con la denuncia que este domingo reveló tareas de inteligencia por parte de organismos del Estado a organizaciones, partidos y sindicatos”.
Repudio a la «amenaza» de la policía
Para la AGD-UBA, la presencia policial de la fuerza de seguridad porteña “se inscribe, además, en una acción sistemática de intimidación, persecución y represión de las luchas que van creciendo contra las políticas del gobierno” que calificaron de “liberfacho”.
Es que, culminaron, “precisamente nuestra asamblea se realizaba para discutir y aprobar un plan de lucha con un paro de una semana en la perspectiva de la huelga general”.
Por último, anunciaron que además del propio sindicato “la asamblea por unanimidad denunció y repudió esta amenaza policial” y que realizaron un “llamado a la docencia y a organizaciones hermanas a sumar pronunciamientos en este mismo sentido” porque “no vamos a naturalizar la intimidación policial. Las asambleas son de sus trabajadores”.
