Emocionada, conmovida pero aliviada. Así ingresó Thelma Fardin a la sala de Amnistía Internacional donde se realizó la conferencia prensa tras conocerse el fallo condenatorio al actor y abusador, Juan Darthés.

Este lunes se conoció que el Tribunal Federal de Segunda Instancia de Brasil condenó a Darthés a seis años de prisión efectiva, en un régimen abierto. El juicio contra Darthés había comenzado en noviembre de 2021 por abuso sexual agravado cuando Thelma Fardin tenía 16 años y él 45. Los hechos ocurrieron en 2009, durante una gira del programa Patito Feo en Nicaragua. En mayo de 2023, la justicia de Brasil había absuelto al actor en una primera instancia.

Tras evaluar el fallo absolutorio y la robusta carga de pruebas, este segundo tribunal se inclinó por la condena, en forma, según dijeron los abogados, contundente. La prisión se efectivizará cuando quede firme la sentencia.

“Primero, gracias a todas esas personas que se atrevieron a hablar hace muchos años después de esa conferencia de prensa donde hacía mi denuncia. Gracias porque ese enorme movimiento es el que permitió que hoy estemos acá, a pesar de todas las trabas que han puesto en la rueda”, dijo la actriz sentada junto a Paola García Rey, directora adjunta de la organización y sus abogados Martín Arias Duval y Carla Junqueira.

Agradeció en forma particular a los abogados Carla Junqueira y Martía Arias Duval por “creer en mí, por poner de ustedes y de sus bolsillos las herramientas para poder litigar en este caso que ha sido tan complejo, porque además requería que fuéramos a otro país”, y a Amnistía Internacional.

También se refirió a la primera denuncia pública que se hizo junto a sus colegas de Actrices Argentinas. “Gracias a todas esas actrices que pusieron el cuerpo para que esta denuncia tuviera la relevancia que tuvo. No sabíamos del impacto que podía generar, pero una vez que se generó nos hicimos responsables y seguimos adelante”, expresó Fardin.

Thelma Fardin junto a Paola García Rey de Amnistía Internacional y sus abogados, Carla Junqueira y Martía Arias Duval.

Un mensaje para todxs

“Esta sentencia tiene que ser un mensaje de esperanza para todas esas personas que hoy todavía están sufriendo algún tipo de abuso. Tiene que ser una esperanza para que, aunque piensen que es muy difícil que la persona a la que tienen que denunciar es muy poderosa, hay una posibilidad de reparación en la justicia como es hoy en mi caso. Y sobre todo hay una posibilidad de reparación que nos involucra a todos como sociedad, que es la que tenemos que seguir construyendo todos, desde la empatía”, agregó Fardin.

Además, pidió, “si tenés a alguien que cuenta su historia, que elige contarte su dolor, empatizá. La justicia también la tenemos que construir cada uno de nosotros y tenemos una responsabilidad en ese sentido. A mí me dijeron que vaya a la Justicia, que espere a ver qué era lo que decía la justicia. Al fin la justicia dice que es culpable. Al fin la justicia escucha mi palabra, me cree y creyéndome a mí les cree a muchas otras.

La actriz agradeció al “enorme movimiento de mujeres porque pude hablar. Ese movimiento que hoy está siendo tan denostado, gracias a esas redes enormes que se tejieron es que yo pude romper el silencio y que pude salir del dolor inmenso que me había provocado la violencia que sufrí. Pude construir una vida sin ese peso encima y que se imaginan que hoy pesó mucho menos. Siento que mi enorme esfuerzo y el esfuerzo de toda la gente que estuvo al lado mío valió la pena.”

Thelma Fardin junto a compañeras y colegas que la acompañaron en su pedido de justicia.
Foto: LUIS ROBAYO AFP

El hostigamiento permanente

En otro momento de la conferencia de prensa, que comenzó alrededor de las 18 del lunes, la actriz recordó todos los ataques que sufrió desde aquel diciembre de 2018 cuando denunció a su abusador. “Recibí muchísimos ataques. Pero si mi nombre, mi cara y mi voz sirvieron para que muchas otras personas se animen a hablar la he puesto a disposición. Me he puesto a disposición para que así sea. Eso no me hizo claudicar”.

Con respecto a cómo se siente con el fallo, Fardin expresó. “Siento alivio. Este escenario es el que esperaba el día que comencé todo este recorrido. Nunca mi recorrido tuvo que ver con buscar venganza o una represalia. Para mí lo importante era ir y rescatar a esa niña de 16 años que fui y darle algún tipo de reparación. También poder mirar a los ojos a las hijas de mis amigas y decirles que hice todo lo posible para que este mundo sea un poco más justo, para que ellas se animen a hablar y para que no sufran violencia”.

Dijo, además, que más allá del cansancio sentía la gran responsabilidad de seguir adelante. “A pesar de hoy yo haber conseguido justicia, no me olvido de todas esas otras personas que todavía no consiguieron justicia o que están sufriendo violencia”.

Destacó, por otro lado, que el fallo fue un avance no sólo en términos sociales sino también judiciales, porque se trata de un fallo con perspectiva en derechos humanos. “Hoy es mucho más fácil pasar la página porque hay una reparación de un modo que en un momento había sido muy difícil imaginar. Me consolaba con la reparación en términos de lo que la sociedad había hecho con mi historia y con mi denuncia. Pero claro este fallo termina de ser la manera de sacar un gran peso de encima”.

Por último, la actriz, recordó que la noche en que se realizó la denuncia contra Darthés, en 2018, la línea 144 incrementó la atención en un 1.200%, a causa de las denuncias por abuso sexual, “¿adónde van a llamar hoy esas mujeres esas personas que están sufriendo violencia teniendo desmantelado el 144? Entonces el mensaje sigue siendo el de la unión colectiva”.

Foto: Luis Robayo / AFP

Un resultado reparador

El abogado Martín Arias Duval dijo el caso es una “luz de esperanza respecto de la ruptura de ciertos estereotipos y modos de actuar de los sistemas de administración de justicia, sobre todo en Latinoamérica”. Destacó que se trata de un delito grave y que fue inédito que tres ministerios públicos fiscales: Argentina, Nicaragua y Brasil colaboraron recíprocamente para asegurar las pruebas del caso y llevarlo a juicio. “Es una práctica que deseamos que se repita no solo en nuestro país sino también en toda nuestra región.”

Acerca de la sentencia, explicó que el testimonio de la víctima cobró gran relevancia y estuvo acompañado por la prueba producida. “Se logra un resultado, en cierto sentido reparador. Y también nos enseña la importancia de la evolución del derecho internacional. Hay una convención internacional de la cual, tanto Argentina como Brasil, estamos sometidos porque la hemos suscripto y la hemos ratificado en nuestros derechos internos, que es la Convención de Belém do Pará, que da pautas a los operadores de los sistemas judiciales acerca de cómo tratar y cómo valorar a las víctimas de delitos vinculados a cuestiones de género.”

La abogada brasileña, Carla Junqueira, también se refirió a las particularidades del fallo. “Tres fiscalías de tres países distintos entendieron que había materialidad y autoría de un crimen. Y a pesar de todos los esfuerzos de la defensa para dejar de lado todos los precedentes internacionales sobre valoración de la prueba y casos de abuso no lograron hacerlo. El precedente que hoy tenemos en Brasil es un precedente que dice ‘en casos de abuso sexual, la palabra de la víctima tiene fundamental importancia, principalmente cuando es consistente con el resto del conjunto probatorio’. Esto entendió la justicia.”

Thelma junto a sus compañeras denunció a Juan Darthés por abuso sexual, diciembre de 2018.
Foto: Archivo/Mariano Espinosa

Ambos abogados aclararon que no hubo nuevas pruebas, sino que el juez en primera instancia no conocía el caso y juzgó las pruebas sin tener en cuenta la jurisprudencia nacional e internacional.

Por su parte, Paola García Rey, de Amnistía, expresó. “Los jueces del Tribunal Federal de segunda Instancia dieron un paso firme en la construcción de una justicia que condena la violencia sexual y la violencia de género. Con ello envía un claro mensaje a las niñas y mujeres en toda Latinoamérica de que pueden confiar en el sistema y animarse a denunciar.”

Resaltó que, en la Argentina, de acuerdo a los datos aportados por la UFEM, solo el 15% de denuncias por delitos contra la integridad sexual llega a sentencias condenatorias. Esta tasa en Brasil es apenas del 1%.”

“Para decidir de esta manera, la justicia brasileña ponderó los estándares internacionales de derechos humanos que establecen la forma en que deben investigarse este tipo de casos. Primero y fundamental, el respeto a los tiempos de las víctimas. Muchas veces las infancias, las niñas y mujeres no se animan o les insume tiempo romper ese silencio y animarse a denunciar. Es clave poder valorar y tener en consideración ese tiempo.”

Y resaltó: “los jueces, además, centraron su análisis en el acusado, su responsabilidad como adulto en la situación de abuso y el rol de poder que tuvo Darthés hacia Thelma. Eso, de alguna manera, va a contramano de lo que hace en general la justicia, que es poner solo el ojo en las víctimas y ponderar cuánto se resistió, cuánto se debía haber resistido Thelma en la situación de abuso. Todo esto como si hubiera que tener o que seguir explicando que no es no.”

Un proceso revictimizante

García Rey, además de destacar las virtudes del fallo, recordó cómo fue el proceso. “Fue extremadamente revictimizante. Thelma fue sometida a nueve pericias, tres de ellas en Nicaragua, cinco en Argentina y una en Brasil. En todo momento se dedicaron a hurgar sobre su vida privada, sobre su familia y la justicia, en lugar de ocuparse justamente de revisar el enorme acervo probatorio y la cantidad de pruebas disponibles, buscaba la fisura, el testimonio de Thelma. Ella declaró tres veces. En cambio, Darthes lo hizo solo una vez. Y en esa única oportunidad se negó a responder preguntas. Las estrategias dilatorias también fueron reiteradas, intentó suspender el juicio cuatro veces en otro intento de impunidad”.

También puso énfasis en el hostigamiento que sufrió la actriz desde que denunció. “Diez líneas telefónicas fueron sacadas en su nombre. Con esas líneas se intimidaba tanto a ella como a su entorno. De alguna manera en todo este proceso, Thelma fue víctima no solo de la situación de abuso, sino también desde el momento en que se animó a denunciar una campaña de hostigamiento, de odio, de acoso y violencia. Por eso esta decisión también representa un respaldo y un apoyo contra la ola de desprestigio y de violencia en los años de lucha que vivió la actriz.”

Por último, García Rey manifestó la importancia del fallo “en un contexto de extrema regresividad en las agendas y en las narrativas de género, con un desfinanciamiento obsceno en la política pública en materia de género. Esta decisión también es una luz y un avance para las mujeres y las niñas en la región y llama a seguir construyendo una justicia dispuesta a condenar la violencia sexual.”