Al cierre del período de preinscripción en la lista de solicitantes para tomar el control de la cerealera Vicentin, once empresas formalizaron su interés en ello.
Así lo informó el juez Civil y Comercial de la Segunda Nominación de Reconquista, Fabián Lorenzini, quien agregó que la lista está compuesta por Molinos Agro, Bunge SA, Viterra Argentina, LDC Argentina, Grassi SA, Unión Agrícola de Avellaneda (UAA), Atilio Marotte, Yabitel SA, Barbero Cereales SAU y Bioenergías Agropecuarias.
El juez indicó que el mecanismo de preinscripción “funcionó con normalidad”. La aclaración viene a cuento ya que la decisión de abrir ese registro provocó una impugnación de parte de los directores de Vicentin desplazados a partir de la decisión de dar de baja la propuesta de acuerdo con los acreedores (que obligaba al Banco Nación a aceptar una quita de su acreencia de más del 75%) y pasar a la venta de los activos al mejor postor (cram down).
Al rechazar ese recurso presentado por los directores desplazados, Lorenzini consideró que era “infundado” y consideró improcedente la apelación subsidiaria. Además, recordó a los directores que sus planteos ante la Corte Suprema de Santa Fe y la Corte Suprema de la Nación no tienen efecto suspensivo y, por ende, no paralizan la resolución judicial que habilita el rescate.
El juez defendió el mecanismo de preinscripción de oferentes ante las críticas de los exdirectivos, al calificarlas como “irreflexivas” y contrarias al principio de conservación de la unidad productiva. Además, defendió la transparencia del proceso y dejó en claro que el objetivo es preservar la empresa, el empleo y la cadena de valor asociada.
Mientras tanto, la familia Vicentin solicitó ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación que suspenda el cram down con el argumento de que podría causar “daños irreparables”. En el ambiente judicial se cree que la Corte Suprema no tomará el caso y dejará hacer al juez Lorenzini ya que la apertura del cram down y el interés manifestado por las once empresas habría “cambiado radicalmente” el escenario previo de Vicentin, señalaron en Tribunales.
A los supremos no se les escapa que la propuesta de cram down de Lorenzini mantiene la unidad productiva y hasta habilita a los accionistas principales y directivos desplazados a participar como oferentes.
Vicentin fue el default privado más grande de la historia argentina, con U$S 1350 millones de deuda y más de 1600 acreedores. «