Según lo anunció la editorial Páginas de Espuma Marina Closs, quien presentó el libro inédito  de cuentos Pombero, comparte el tramo final de la competencia por el Premio Internacional Ribera del Duero con la mexicana Laura Baeza (Una grieta en la noche), la boliviana Liliana Colanzi (Ustedes brillan en lo oscuro), la chilena María José Navía (Todo lo que aprendimos de las películas), y el cubano Pedro Juan Gutiérrez (Un meteorito flamígero). La lista de finalistas es una muestra elocuente del lugar que las mujeres van ganando a pasos agigantados en el campo de la literatura.

En esta séptima edición del premio se presentaron cerca de 1000 obras procedentes de 37 países.

La escritora argentina nació en Aristóbulo del Valle, Misiones, en 1990 y es licenciada en Letras por la Universidad de Buenos Aires (UBA).

Publicó en 2013  el libro de cuentos La doncella aguja  y, en 2016, El violín a vapor. Además,  una variación fantástica sobre la vida de Jesús llamada El pequeño sudario (2014).  En 2018 fue  distinguida por el Fondo Nacional de las Artes por el cuento Tres Truenos y había recibido el premio Angélica Gorodischer por la novela Álvar Núñez: trabajos de sed y de hambre. Ambos libros se publicaron en 2019.  En 2021 publicó en Argentina Monchi Mesa y Tascá Skromeda y aparecieron en México y en España las ediciones de Tres truenos. La edición española figura entre los tres libros finalistas del premio Finestres.

En una entrevista realizada por Luciano Lamberti para el blog de Eterna Cadencia, la autora se refirió a su proceso creativo: “Empiezo a escribir con el ritmo, para mí el ritmo es la manera en la que yo voy a otro párrafo. Después cuando corrijo sí trato de que haya una estructura. Yo tuve toda esa caída mortal en el modernismo, de la que me recuperé hace dos años. Yo siempre quería escribir así, una de esas cosas pantanosas en la que no ocurre nada. Desde el principio yo quería escribir así. Cosas muy feas, que después tiré. Entonces empecé a leer esos cuentos de los hermanos Grimm, donde lo importante es la imagen, no el lenguaje. Están buenísimas las imágenes, tiene esa cosa como cruel y delicada. Entonces empecé a escribir unos cuentitos que tienen una influencia muy grande de Marosa Di Giorgio y tenían eso como de los cuentitos, de una historia pequeñita y muy delirante. Una vez le mostré a un novio que tenía, con muchísima vergüenza. Y él se reía. Porque cuando yo escribo sobre cosas crueles no lo hago desde la tristeza y del dolor, sino desde el humor.”

Habrá que esperar hasta el 24 de marzo para saber el nombre del ganador o ganadora  el premio. El resultado será anunciado a través en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.