Los caminos del deporte apuntan a la Torre Eiffel: París se prepara para recibir a los próximos Juegos Olímpicos y al mejor futbolista del mundo, Lionel Messi, que se despidió del Barcelona con una conferencia de prensa histórica. Mientras tanto, la Ligue 1 de Francia es la única de las principales europeas que ya comenzó: el PSG debutó con un triunfo ajustado. El Rojo se llevó el clásico de Avellaneda y se trepó a la punta. La vigencia del Pepe Sand. 

Adiós Tokio: el cierre de unos Juegos Olímpicos de otro mundo

Tokio cerró este domingo los Juegos Olímpicos más particulares de la historia, realizados en año impar, postergados por la pandemia y sin presencia de público en los eventos. La cultura japonesa lo hizo posible y fueron 16 días de competencia con el deporte en el centro de la escena. El espíritu de la despedida lo resumió con dos palabras Thomas Bach: «Lo hicimos». Sin las figuras todopoderosas de otros tiempos y con Estados Unidos liderando el medallero en un gran cierre, el foco estuvo puesto en la salud mental, luego de que la gimnasta Simon Biles pusiera el tema sobre la mesa tras contar su vía crucis emocional. Aunque Japón atravesó su peor momento de contagios desde que comenzó la pandemia, la burbuja de la Villa Olímpica funcionó: no hubo brotes masivos y apenas 0,02% de los testeados dieron positivo. Para 2024 se espera que París sea una fiesta: el relanzamiento olímpico en la Ciudad de la Luz, con la ilusión de que el coronavirus y las gradas vacías sean una pesadilla del pasado.

Dueño de Avellaneda y de la tabla del campeonato

Independiente se dio un gustazo: bajo la lluvia, se llevó un clásico con muchas situaciones por lado y se trepó a la punta del campeonato. En la mitad roja de Avellaneda se festejó con todo: cortó una racha de tres triunfos en fila de Racing y, además, se convirtió en líder del torneo por primera vez en 11 años. El partido estuvo dominado por el agua que cayó durante todo el domingo: la cancha rápida volvió el trámite de ida y vuelta, con chances de gol para los dos. El que se equivocara, pagaba. Falló Eugenio Mena en un cierre, lo aprovechó Sebastián Palacios y lo definió Silvio Romero. El 1 a 0 selló el clásico, el mejor trampolín a la cima de la tabla. 

Mientras espera por Messi, el PSG debutó en la Ligue 1 con un ajustado triunfo

La Ligue 1 de Francia fue pionera este fin de semana en Europa: mientras la mayoría jugó amistosos de preparación, la liga gala puso primera. El PSG debutó con un ajustado triunfo ante el recién ascendido Troyes, por 2 a 1, mientras todos parecen más pendientes por el arribo de Lionel Messi. Achraf Hakimi, uno de los refuerzos estelares, y el argentino Mauro Icardi marcaron los goles. Mauricio Pochettino no contó con todas sus figuras, pero sí estuvo Kylian Mbappé y otro de los el fichajes, el holandés Georginio Wijnaldum. En Troyes hubo 16 mil expectadores. Entre la delegación visitante no se vio ni al presidente Nasser Al-Khelaïfi ni al director deportivo Leonardo, más atentos a las negociaciones por Messi que al debut liguero. La llegada del 10 pone al fútbol francés en estado de ebullición. En el buen triunfo como visitante del Olympique de Marsella de Sampaoli ante Montpellier hubo incidentes con los hinchas que no se bancaron la derrota. Al entrenador el Brest le preguntaron cómo se tomaba la llegada de Leo: “con el perdón de la grosería, me la pone dura”.

Sand: no hay edad para los goles

A los 91 minutos de juego, José Sand tomó la pelota fuera del área y a pura potencia marcó el 1 a 0 de Lanús sobre Huracán. A los 41 años, lo del correntino es formidable: lleva seis gritos en las primeras cinco fechas de este campeonato. En la primera jornada del torneo ya se había dado el gusto de convertir y transformarse en el anotador más veterano de la historia del fútbol argentino. Una vigencia extraordinaria. Mientras algunos partidos se confunden con juegos de Reserva por la cantidad de juveniles que saltan a la cancha en cada equipo, Sand pone en juego toda su experiencia para continuar la senda goleadora que camina desde el siglo pasado: debutó en el Apertura 99. Seis de los futbolistas con los que compartió cancha el pasado sábado no habían nacido cuando el Pepe se estrenó en Primera, con la camiseta de Colón. Ahora disfrutan sus goles. 

Messi le puso palabras y lágrimas a lo impensado: se despidió del Barcelona

Con un traje impecable y los 35 trofeos que ganó en el club como parte de la escenografía, Lionel Messi dio una conferencia de prensa histórica en su despedida del Barca. El 10 apareció en escena a pura lágrima, conmovido. Se repuso. Dijo unas palabras en las que explicó la sorpresiva salida y luego se abrió a las preguntas. El presidente Joan Laporta ya dio su testimonio. También Leo. Sin embargo hay interrogantes que quedan en el aire: hay una pieza del rompecabezas que falta para comprender por qué el Barcelona deja ir al mejor jugador del mundo, que quería seguir, y por qué de un minuto al otro la renovación se transformó en despedida. “No se pudo. Lo único que sé es que yo hice todo lo que se podía hacer”, dijo Messi, que también contó que se bajó la ficha al 50%, que todo estaba encaminado y que no hubo otro pedido del club hacia él. Aunque no lo confirmó, acaso porque no era el escenario ideal para eso, ya prepara la mudanza a París: “Es una opción. Soy un ganador, un competidor. Quiero volver a ganar la Champions y quiero pasar a mi amigo Dani Alves, que lo felicito por el Oro en los Juegos pero quiero pasarlo y ser el que más títulos ganó”.